Entre las principales diferencias del pliego aprobado en 2014 con respecto al contrato actual, el alcalde destacó que incluye una definición del servicio “mucho más exhaustiva”, de manera que se especifica “quién hace cada cosa y cómo se hace”. El número mínimo de trabajadores pasará de 72 a 92, 32 de ellos asignados a limpieza viaria y los 60 restantes a la recogida de residuos. Además aumentan las frecuencias de recogida, el número de contenedores o su mantenimiento.
Por su parte, el concejal de Sostenibilidad Medioambiental, Pedro Fernández, recalcó que estos nuevos contratos supondrán un ahorro anual de 340.000 euros para las arcas municipales, aunque advirtió de que “no solucionarán de manera definitiva el problema de la recogida de residuos”. En ese sentido, anunció la puesta en marcha de al menos dos campañas de concienciación para involucrar a la ciudadanía en la necesidad de reducir los residuos y de mantener limpia la vía pública. “No todo puede solucionarse con más limpieza”, señaló el edil, que recordó que cada ponferradino es responsable de producir casi un kilo de residuos al día.
Respecto a una futura municipalización del servicio, Fernández recordó que desde la llegada del actual equipo de Gobierno, el Ayuntamiento ha invertido 1,95 millones en adquisición de maquinaria para estos servicios. “Si seguimos a este ritmo de inversión, en 2025 estaremos en condiciones de afrontar la municipalización”, apuntó.
Así, el alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón, valoró este martes los nuevos contratos de recogida de basura y limpieza viaria a cuya adjudicación deberá dar luz verde el pleno del Ayuntamiento de este viernes, tras el visto bueno recibido hoy en la comisión de Medio Ambiente. Según explicó el regidor, los nuevos pliegos de condiciones establecen sistemas de control tecnológico de la prestación de los servicios, tanto a nivel cualitativo como cuantitativo, lo que permitirá al equipo de Gobierno ser más “riguroso y exhaustivo” a la hora de detectar posibles incumplimientos.
En ese sentido, Ramón recalcó que los datos de ese sistema de control a través de GPS se gestionarán mediante una plataforma ajena a la empresa adjudicataria, con el objetivo de evitar suspicacias. Además, el contrato establece también un sistema de facturación mensual, de manera que el Consistorio gozará de más facilidades detraer de los pagos las cantidades correspondientes a los eventuales incumplimientos. “Nos vamos a cuidar muy mucho de que esos incumplimientos no se produzcan”, subrayó.
De acuerdo con la propuesta de la mesa de contratación, la propuesta que el viernes irá a pleno supondrá adjudicar los dos lotes de contratos a la empresa FCC, actual prestataria del servicio. Licitados por un coste global de 6,24 millones, los dos contratos se adjudicaron por un valor final de 5,9 millones, por un periodo de tres años prorrogables a uno más.
Por su parte, el concejal de Sostenibilidad Medioambiental, Pedro Fernández, recalcó que estos nuevos contratos supondrán un ahorro anual de 340.000 euros para las arcas municipales, aunque advirtió de que “no solucionarán de manera definitiva el problema de la recogida de residuos”. En ese sentido, anunció la puesta en marcha de al menos dos campañas de concienciación para involucrar a la ciudadanía en la necesidad de reducir los residuos y de mantener limpia la vía pública. “No todo puede solucionarse con más limpieza”, señaló el edil, que recordó que cada ponferradino es responsable de producir casi un kilo de residuos al día.
Respecto a una futura municipalización del servicio, Fernández recordó que desde la llegada del actual equipo de Gobierno, el Ayuntamiento ha invertido 1,95 millones en adquisición de maquinaria para estos servicios. “Si seguimos a este ritmo de inversión, en 2025 estaremos en condiciones de afrontar la municipalización”, apuntó.
Así, el alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón, valoró este martes los nuevos contratos de recogida de basura y limpieza viaria a cuya adjudicación deberá dar luz verde el pleno del Ayuntamiento de este viernes, tras el visto bueno recibido hoy en la comisión de Medio Ambiente. Según explicó el regidor, los nuevos pliegos de condiciones establecen sistemas de control tecnológico de la prestación de los servicios, tanto a nivel cualitativo como cuantitativo, lo que permitirá al equipo de Gobierno ser más “riguroso y exhaustivo” a la hora de detectar posibles incumplimientos.
En ese sentido, Ramón recalcó que los datos de ese sistema de control a través de GPS se gestionarán mediante una plataforma ajena a la empresa adjudicataria, con el objetivo de evitar suspicacias. Además, el contrato establece también un sistema de facturación mensual, de manera que el Consistorio gozará de más facilidades detraer de los pagos las cantidades correspondientes a los eventuales incumplimientos. “Nos vamos a cuidar muy mucho de que esos incumplimientos no se produzcan”, subrayó.
De acuerdo con la propuesta de la mesa de contratación, la propuesta que el viernes irá a pleno supondrá adjudicar los dos lotes de contratos a la empresa FCC, actual prestataria del servicio. Licitados por un coste global de 6,24 millones, los dos contratos se adjudicaron por un valor final de 5,9 millones, por un periodo de tres años prorrogables a uno más.