Los populares consideran que el Crucero es "atropellado continuamente por los conductores incívicos que chocan contra él, víctima de la falta de aparcamiento en Cacabelos, y han conseguido desplazar los sillares de granito que aseguraban su base".
"Esto hace que la estabilidad del monumento peligre seriamente y en cualquier momento pueda desplomarse al lado de la entrada principal de la Parroquia, lugar de culto diario y donde juegan los más de 60 niños que acuden semanalmente a catequesis", han asegurado.
Además, afirman que el Ayuntamiento es conocedor de esta circunstancia desde hace meses y exigen al Gobierno Tripartito "que cumpla con su obligación y se ocupe inmediatamente del Patrimonio Municipal, por una cuestión urgente de seguridad ciudadana".
"Nos parece lamentable e injustificable el absoluto abandono de un monumento municipal en peligro por la total falta de conservación y mantenimiento", aseguran. "Una estatua obsequiada al pueblo por la Parroquia en 2012, perfectamente autorizada su ubicación en la vía pública por la Comisión Territorial de Patrimonio Cultural de la Junta de Castilla y León, y colocada definitivamente en su emplazamiento actual, desde la Semana Santa del 2013".