El portavoz del grupo municipal del PP y exalcalde de Priaranza del Bierzo, José Manuel Blanco, instó este martes al actual equipo de Gobierno a “dejar de marear la perdiz y asumir de una vez por todas la tarea de gobernar que le corresponde”. Blanco lamentó que “la única preocupación” de los actuales responsables del Consistorio sea la de desprestigiar la “intensa e indiscutible” labor de los ‘populares’ al frente del Ayuntamiento, a través de “informaciones sesgadas e incompletas” y de la “judicialización de la actividad municipal”.
En ese sentido, el ex-regidor recordó que fue durante la etapa de Gobierno del PP cuando el municipio avanzó en la senda de la “modernización”, con mejoras como la nueva captación de agua, la llegada de la fibra óptica o el “logro de poner el nombre del municipio en el mapa turístico internacional a través del Camino de Invierno a Santiago”.
En la misma línea, retó al alcalde, el socialista José Reguera, a enumerar las obras o iniciativas propias de su equipo de Gobierno “que no sean inauguraciones de las obras licitadas que heredó del Gobierno de los populares” y reclamó “acciones reales y contundentes” dirigidas a mejorar la vida de los vecinos, después de un año marcado por la crisis sanitaria, económica y social.
Baile de cifras
Después de que el actual equipo de Gobierno asegurase el pasado lunes que en los 21 meses del actual mandato la deuda municipal se redujo más de un 60%, Blanco señaló que “cuando el PP llegó al Ayuntamiento se encontró una deuda de cerca de 600.000 euros, un gasto corriente por las nubes y una recaudación de tan solo 70.000 euros de IBI”, una situación que atribuyen a la “herencia” recibida de manos de los anteriores alcaldes socialistas.
Según Blanco, los préstamos solicitados durante su etapa como alcalde sirvieron para amortizar parte de esa deuda y para financiar actuaciones como la renovación de redes de saneamiento, la pavimentación de calles y la ejecución de aceras o la puesta en valor de enclaves como el castillo de Cornatel, las Caleras y las Barrancas de Santalla.
Igualmente, el exalcalde reprochó a Reguera que no reconozca que la amortización de deuda conseguida en este mandato es posible gracias a la actualización del catastro llevada a cabo por el PP, que permitió incrementar la recaudación anual del IBI hasta una cantidad próxima a los 180.000 euros.
En ese sentido, el ex-regidor recordó que fue durante la etapa de Gobierno del PP cuando el municipio avanzó en la senda de la “modernización”, con mejoras como la nueva captación de agua, la llegada de la fibra óptica o el “logro de poner el nombre del municipio en el mapa turístico internacional a través del Camino de Invierno a Santiago”.
En la misma línea, retó al alcalde, el socialista José Reguera, a enumerar las obras o iniciativas propias de su equipo de Gobierno “que no sean inauguraciones de las obras licitadas que heredó del Gobierno de los populares” y reclamó “acciones reales y contundentes” dirigidas a mejorar la vida de los vecinos, después de un año marcado por la crisis sanitaria, económica y social.
Baile de cifras
Después de que el actual equipo de Gobierno asegurase el pasado lunes que en los 21 meses del actual mandato la deuda municipal se redujo más de un 60%, Blanco señaló que “cuando el PP llegó al Ayuntamiento se encontró una deuda de cerca de 600.000 euros, un gasto corriente por las nubes y una recaudación de tan solo 70.000 euros de IBI”, una situación que atribuyen a la “herencia” recibida de manos de los anteriores alcaldes socialistas.
Según Blanco, los préstamos solicitados durante su etapa como alcalde sirvieron para amortizar parte de esa deuda y para financiar actuaciones como la renovación de redes de saneamiento, la pavimentación de calles y la ejecución de aceras o la puesta en valor de enclaves como el castillo de Cornatel, las Caleras y las Barrancas de Santalla.
Igualmente, el exalcalde reprochó a Reguera que no reconozca que la amortización de deuda conseguida en este mandato es posible gracias a la actualización del catastro llevada a cabo por el PP, que permitió incrementar la recaudación anual del IBI hasta una cantidad próxima a los 180.000 euros.