El sector de la pizarra paraliza su producción en todo el país ante la alarma del Coronavirus. En este sentido, los aproximadamente 4.000 trabajadores del sector a nivel nacional cogerán una semana de vacaciones -con posibilidad de prorrogarlo a dos-, mientras que los empresarios del gremio en Galicia y Castilla y León estudian tramitar un Expediente de Regulación Temporal del Empleo (ERTE). En cualquier caso, la medida no parece aplicarse al sector de la pizarra al no aplicarse la “causa de fuerza mayor”.
La decisión parte del cambio logístico tanto en las empresas como en la distribución derivados del estado de alarma decretado por el Gobierno central. Por lo tanto, en este escenario, la patronal consultará con el Ministerio de Trabajo la viabilidad del ERTE. En la provincia de León se agrupan aproximadamente 1.500 trabajadores del sector de la pizarra.
El presidente de la Asociación de Pizarristas de Castilla y León (Apical), Eliseo López, confirmó que las empresas del sector tomaron la “decisión unánime” de “parar la actividad de forma preventiva y provisional” como medida para hacer frente a la propagación del coronavirus Covid-19. Tras la reunión convocada por la Federación Nacional de Pizarra para analizar la situación tras la entrada en vigor del estado de alarma, López avanzó que el parón se mantendrá, en principio, hasta Semana Santa, aunque señaló que “es una situación que se puede revertir en función de las decisiones del Gobierno que afecten al sector”.
Al respecto, López señaló que “la parada en el sector es total desde este martes” y se debe a que las medidas de lucha que los distintos gobiernos han tomado para frenar la pandemia provocan problemas en el aprovisionamiento de las explotaciones, así como en el envío de la mercancía a los países de destino.
A partir de este martes, las distintas empresas deberán negociar con los trabajadores y con sus representantes las condiciones del parón en la actividad. Algunas compañías comenzaron a ofrecer vacaciones a sus empleados, confirmó el presidente de Apical, que recalcó que esta situación se mantendrá “como mínimo, durante una o dos semanas”, en función de la realidad de cada empresa.