Los trabajadores del call center y el CSIF se han puesto de acuerdo y han llegado a la solución intermedia de retirar la denuncia judicial contra el convenio después de que la dirección de la compañía se haya comprometido a mejorar el acuerdo a partir de su finalización en 12 meses.
La portavoz de la plataforma, Lucía Rosado, ha afirmado que "las cuentas mostradas por la dirección a los integrantes del colectivo dejaban un margen de beneficio que, de ganarse la impugnación, abocarían al cierre a la compañía en el pago de indemnizaciones".
Por su parte, el delegado de CSIF, David García, ha reconocido que "la retirada de la impugnación era necesaria después de que la plataforma presentase 330 firmas de los más de 400 trabajadores en los que se mostraban reacios a esta impugnación en la medida que pudiese derivar en comprometer la viabilidad de la empresa". De ahí que hayan asumido la situación a cambio eso sí de lograr que la empresa reduzca en 1 año el acceso a la categoría junio de teleoperador y con el compromiso de que mantendrá los 60 puestos que, actualmente, están adscritos al contrato de una compañía y cuya continuidad estaba pendiente de nuevas negociaciones.