La localidad leonesa de La Robla ha vivido una de sus peores noches en los últimos años a causa de los efectos del temporal. A la esperable riada y la consiguiente inundación de la zona este del pueblo, es decir, proveniente del río Bernesga, se ha unido la inesperada llegada de otro 'río' generado desde el lavadero de la Hullera Vasco Leonesa, que ha canalizado de manera inesperada una ingente cantidad no sólo de agua sino de arrastre de carbón proveniente del túnel canalizado que llega de la Corta Pastora del cielo abierto, según informa el diario provincial ileón.com.
La situación ha enfrentado a La Robla en realidad a dos inundaciones, la del este por parte del cauce fluvial, algo esperable, y la del oeste que ha llegado por la canalización que llega desde Santa Lucía de Gordón. La situación ha provocado no sólo importantes daños sino verdadero peligro, incluso para las personas, según ha confirmado el alcalde de La Robla, Santiago Dorado, que ha vivido en tensión durante toda la noche y la madrugada.
Fruto de la situación, a última hora del lunes se solicitó la presencia de la Unidad Militar de Emergencias (UME). Una solicitud que autorizó oficialmente la Delegación del Gobierno y la Junta de Castilla y León, de manera que a la localidad llegaron un total de 91 militares autorizados a desplegarse para centrarse en labores de achique y contención de inundaciones. También se han desplegado un total de 18 vehículos. Su labor ha sido intensa a lo largo de varias horas durante la noche para evitar males mayores, aunque la parte superior de la localidad ya había sufrido el impacto del arrastre del 'río de carbón'.