Los consejos reguladores del Bierzo trasladaron hoy al delegado de la Junta en León, Guillermo García, su preocupación por el nuevo Plan Integral de Residuos de Castilla y León y exigen que el Gobierno autonómico zanje "de una vez por todas" la amenaza que supone la incineración para la huerta y el campo berciano. "No es compatible incinerar con un producto de garantía y de calidad y entendemos que es la Junta quien tiene potestad para solucionar este tema, y además de forma rapida, es la que hace la normativa al fin y al cabo", afirmó la presidenta de la D.O. Manzana Reineta del Bierzo, Dolores Amigo.
En su opinión, este plan "es un resquicio que hay para que las cementeras sigan con su propósito de incinerar" y no entienden que se permita esa posibilidad cuando los productores agrícolas están en producción integrada, tienen que pagar un "peaje" para el reciclaje de envases fitosanitarios y cada año les retiran pesticidas que no pueden utilizar porque "supuestamente" son agresivos con el medio ambiente. Así, Amigo se quejó de que siempre se esté "demorando" el tema de la normativa y no se acabe con la opción de la incineración "que es una espada de Damocles que está siempre ahí y que no sabemos si las cementeras la van a aprovechar o no".
"Es como si a mi me dan una licencia para hacer un huerto el ecológico y al lado dan una licencia para un vertedero", ironizó la responsable de la Manzana Reineta, que insistió en que es un tema que "nos ocupa y nos preocupa", al tiempo que puntualizó que dentro de un proyecto economico y social agrario como el que se está llevando a cabo en el Bierzo, aún teniendo en cuenta los posibles empleos que pueda general la incineración, "lo que se pueda crear con lo que se puede destruir no tiene ninguna comparativa económicamente hablando".
A este respecto, Guillermo García, que acudió al encuentro acompañado del jefe del Servicio Territorial de Agricultura, Fidentino Reyero, intentó tranquilizar a los consejos reguladores y aseguró que el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván, "está preocupado y sobre el tema" y que los técnicos ya están estudiando todas las alegaciones. "Silván dará una respuesta adecuada y también adecuada a la normativa", insistió García.
Robos y fraudes
Otro de los temas abordados en el encuentro fue la preocupación de los responsables de las marcas de garantía por los robos en las fincas en las épocas de cosecha , tanto de pimiento como de frutales. El presidente de la Indicación Geográfica de Garantía (IGP) del Pimiento Asado del Bierzo, Pedro García, reclamó una solución a este problema que supone importantes pérdidas no sólo por el valor de la producción que se llevan sino por los "destrozos" que realizan en las plantaciones. así, Guillermo García comprometió el apoyo de la Junta y su coordinación con la Subdelegación del Gobierno en León para vigilar y evitar este tipo de ataques.
Otra constante en las demandas de sector agroalimentario en el Bierzo es la petición de una solución al fraude que afecta al pimiento y que, lamentó Pedro García, "está en la misma situación que hace diez años". Un problema que hay que atajar tanto en la producción, desmantelando aquellos lugares donde se procesan los pimientos asados, como en la venta, la cuál hay que erradicar. En este sentido, el responsable de esta I.G.P. reconoció que hoy en día hay más gente que está denunciando los lugares donde se realizan estas prácticas y que habitualmente son domicilios particulares, con la dificultad que eso significa a la hora de actuar.
Aún así, Pedro García insistió en que no están en contra de la elaboración casera de pimiento asado para el consumo familiar o para "regalar unos botes a los amigos" y alertó sobre amplias producciones que se ponen a la venta y cuyos pimientos son asados con gas butano -lo tradicional es con leña- porque es más rápido. "Eso está prohibido porque el pimiento coge el sabor del butano", explicó.