Esta sistematización de la producción con el cambio de una línea de acabados, que conllevará una reducción de costes, tiene preocupada a la plantilla porque temen que el cambio pueda provocar recortes en la misma, que actualmente está integrada por 390 personas. Por este motivo, se prevé la celebración de una reunión entre los representantes sindicales y la dirección para poder abordar este asunto.
Un proceso más mecanizado
El cambio de la línea de acabados de uno de los ocho talleres de la factoría funcionará a través de sensores para garantizar que la barra de acero sea de mucha más calidad. De esta forma, también se evitarán posibles fallos o golpes en la producción. El sistema espera estar en funcionamiento en el menor tiempo posible tras solucionar algunos detalles electrónicos pendientes.