Hace más de un mes que en una sesión plenaria el Ayuntamiento de Ponferrada dio luz verde a la aprobación del expediente contractual para la adjudicación del servicio para la recogida de residuos y limpieza viaria dividida en dos lotes, por un lado la recogida de residuos y por otro la limpieza viaria. Sin embargo, desde ese momento se han sucedido distintos problemas debido a la negativa de los trabajadores de limpieza de aceptar esta 'partición' en lotes con concentraciones y manifestaciones en contra. Y tras una modificación en la documentación y diversas reuniones con la plantilla, este viernes se ha vuelto a aprobar con 12 votos a favor, 11 en contra y 2 abstenciones.
Como ha afirmado el edil socialista, Pedro Fernández, el Ayuntamiento se ha reunido con los trabajadores, quienes "con altura de miras, han aceptado las condiciones" de los dos contratos.
La oposición, PP, Cs, el concejal no adscrito y USE, en un pleno con tensión y reproches, se ha negado a aceptar un contrato que, según ellos, "duplica los gastos y genera discriminación entre la plantilla".
De la fuente, el concejal no adscrito, ha acusado al gobierno de querer "engordar las arcas de las empresas concesionarias" y seguir cometiendo los "mismos errores del pasado". Además, ha explicado que el sentido en contra de su voto es "porque la división en lotes no tiene sentido cuando se acaba de aprobar la municipalización de parques y jardines", que es lo que pide para el servicio de basuras.
Han coincidido con el punto de la municipalización tanto el gobierno como la oposición. Lorena González, edil de Podemos, ha explicado que este contrato y la división en lotes es el primer paso para poder devolver al ayuntamiento el servicio de limpieza y basuras, "un tema que lleva enquistado años, desde el macrocontrato". También el alcalde, Olegario Ramón, y el edil berciano Iván Alonso, han coincidido con la edil 'morada' y han explicado "que tras 3 legislaturas arrastrando los problemas derivados de otras corporaciones, estos nuevos contratos permitirán un punto de partida legal que permita mejorar el sistema" hasta el fin último: su municipalización.
Samuel Folgueral, USE Bierzo, ha votado en contra por "la discriminación que supondrá entre los trabajadores" y "los problemas laborales y jurídicos que esto acarreará a corto y medio plazo". Este argumento también ha sido el adoptado por Ruth Morales, Cs, y por Marco Morala, que defiende su voto "por los trabajadores".
Por su parte, Tarsicio Carballo, PRB, se ha abstenido en la votación por entender que pese a las "cosas buenas que tiene el contrato" también encuentra "ciertos problemas así como mejoras".
Finalmente, Fernández ha explicado en sus dos turnos de intervención que las modificaciones que han hecho necesario este pleno extraordinario tan sólo "salvaguardan los derechos de los trabajadores y permiten que el Ayuntamiento controle que se están cumpliendo". Ha querido desmentir así los argumentos de los opositores, ya que "con las nuevas empresas subcontratadas las condiciones pueden ser iguales o mejores", ha sentenciado.