El Club Deportivo Tenis Ponferrada nació siendo una entidad sin ánimo de lucro, concretamente una asociación. Actualmente, esta asociación tiene el mismo leitmotiv que en sus inicios: fomentar la práctica del tenis, entre otros muchos deportes. Su historia transcurre paralela y estrechamente vinculada a la de su ciudad desde nada menos que 1952.
Con más de 14.000 m2 situados en pleno casco urbano, el club tiene una amplia oferta deportiva y social que va más allá del tenis, aunque este deporte sea su piedra angular. De hecho, el pádel, por poner un ejemplo, ocupa buena parte de las actividades que se desarrollan en el club.
Está justo al lado del Parque del Temple, emblemática ubicación en el centro de la ciudad. Zonas ajardinadas, piscinas, pistas deportivas y un magnífico edificio social, entre otras cosas, constituyen el club, en el que se desarrollan todo tipo de actividades a lo largo del año. Desde su ubicación, se puede disfrutar de unas vistas difícilmente comparables: la Basílica de la Encina, el Monte Pajariel, la Iglesia de San Andrés o el Castillo de los Templarios son algunos de estos atractivos visuales.
Además, en abril del pasado 2018, la actual presidenta del club, Dña. María Belén Álvarez Pérez, comunicó que el Rey Don Felipe VI les había concedido el título de “real”, convirtiéndolo en Real Club Deportivo Tenis Ponferrada. Lo cierto es que la denominación no está del todo extendida todavía entre los ciudadanos de Ponferrada y, después de tantos años, es normal que lleve un tiempo incluir la palabra “real” al nombre.
En cualquier caso, ¿qué mejor premio para celebrar sus 66 años de historia? Un hito y un reconocimiento a la trayectoria del club y de quienes han formado parte de él.
Es bien sabido por todos que, además, el club se convierte en una inmejorable forma de crear cantera, de entrenar a los que pueden convertirse en grandes jugadores de tenis en el futuro. No cabe duda de que se trata de un camino duro, lleno de obstáculos y exigencias, pero los tenistas ponferradinos todavía tienen mucho que demostrar. De hecho, algunos de los afiliados a este club aspiran a jugar un Grand Slam o un Open, como lo hacen Djokovic, Nadal o Federer, quienes habitualmente parten como favoritos para levantar el título de este tipo de competiciones, aunque a día de hoy solamente quedan dos que aspiran a llevarse la copa del US Open ya que hace poco nos hemos enterado que Djokovic ha tenido que retirarse del US Open debido a una lesión en el hombro. Si el serbio hubiera ganado esta edición, sería su cuarta, y segunda consecutiva, pues se hizo también con la de 2018. .
Quién le iba a decir a Novak Djokovic, un joven nacido en Belgrado, República Federal Socialista de Yugoslavia (actualmente serbia), al que trasladaron a Alemania, concretamente a la academia de Pilic en Oberschleißheim, para mejorar su tenis, que se iba a convertir en uno de los tenistas más importantes del mundo. Precisamente por casos como el de Djokovic, el Real Club Tenis Ponferrada tiene más sentido que nunca. Crear entornos en los que desarrollar las inquietudes deportivas, afianzar buenos hábitos, una vida saludable y llena de ejercicio constituyen una base fundamental a la hora de crear deportistas de élite.
En cualquier caso, el club va más allá de esto, convirtiéndose en un punto de encuentro y de desarrollo de actividades para familias ponferradinas desde hace varias generaciones. Recientemente podemos ver en su web unas nostálgicas fotografías que el club está intentando situar en un año concreto. Puede que alguno de nuestros lectores pueda ayudarles.
En estas fotografías vemos cómo el club es más que un sitio de entrenamiento, es un lugar donde compartir nuestras historias, donde relacionarnos con nuestros vecinos, donde crecer juntos y disfrutar de un entorno incomparable.