La presencia de mascarillas higiénicas, guantes, gel hidroalcohólico y ventanas abiertas protagonizan una jornada marcada aún por el descenso de la incidencia de la sexta ola
“Tenemos material de sobra, muchísimo”, sostiene María Luisa García, presidenta de una de las mesas del colegio electoral ubicado en el Centro de Educación Infantil y Primara Pedro Gómez Bosques, en el barrio de La Victoria de Valladolid. “En el sobre que nos envío la Administración por correo teníamos todas las indicaciones, pero cuando hemos llegado esta mañana estaba muy bien organizado; solo hemos tenido que distribuirlo por diferentes puntos”, expresa.
Se refiere a la presencia de mascarillas higiénicas, guantes y gel hidroalcohólico, que protagonizan, junto a las ventanas abiertas en pleno mes de febrero, una jornada electoral marcada aún por el descenso de la incidencia de la sexta ola, que el viernes aún se situaba por encima de 1.500 casos a 14 días por cada 100.000 habitantes.

Con estas cifras, extremar las precauciones ante la entrada del votante en los colegios electorales se han más imprescindible si cabe en estas undécimas elecciones autonómicas en Castilla y León, convocadas mediante adelanto electoral el 20 de diciembre por el jefe del Ejecutivo, Alfonso Fernández Mañueco. Ese 13 de febrero ha llegado, y los datos de la pandemia, aunque con tendencia positiva a la baja, aún obligan a cuidar a las personas. De ahí que García enumera algunas de las acciones que esta mañana, antes de abrir a las 9 horas, han tenido que realizar a una todos los componentes de las diferentes meses. “Tenemos mucho material. Hay gel que hemos repartido por varios lugares, papel para limpiar las mesas, las mascarillas higiénicas a disposición de todo aquel que se acerque…”, remarca. A los miembros de la mesa, concretamente, la Junta Electoral les ha facilitado además dos mascarillas FPP2 para la jornada. También se han dispuesto guantes, tanto para el votante como para ellos, “pero es voluntario ponérselos”, sostiene.
Sobre la distancia de seguridad, recuerda que les han recomendado que intenten mantenerla, en torno al metro y medio, al menos con el votante, algo “muy difícil entre los miembros de la mesa para evitar problemas de escucha a la hora de cantar los datos”. Es en este punto donde llega, en el proceso de depósito del voto en la urna, otra de las novedades para evitar contacto y contagios. “Cuando el votante llega, deja su DNI sobre una bandeja que nadie toca, se lee su nombre y apellidos y, comprobado su censo, lo recoge sin que nadie de nosotros lo hayamos tocado”, relata.
Síntomas Covid
Lógicamente, el Covid sobrevuela la incertidumbre sobre aquellos que pudieran tener síntomas y que forman parte a priori de las mesas. “Nadie nos ha comentado que no debiéramos venir si hoy nos levantábamos con ellos”, asevera María Luisa García, quien considera que “eso ya cae por sentido común de cada uno”.
En todo caso, a diferencia de otras jornadas electorales que se han celebrado hasta ahora durante la pandemia, las últimas en Madrid en mayo de 2021, los votantes que hayan dado positivo en los días previos podrán suspender temporalmente su cuarentena para acudir a votar.


RECOMENDACIONES
La Junta de Castilla y León no ha implantado medidas restrictivas para esta jornada, son solo unas recomendaciones, como que los electores lleven el voto preparado de casa para evitar las aglomeraciones; prioridad para mayores de 65 años o con alguna discapacidad, a los que se pide acudir al colegio entre las 10 y 12 de la mañana, que habrá menos gente.
También, se recomienda que las puertas de los locales electorales están, siempre que se pueda, abiertas, mantener los lugares del voto lo más diáfanos posibles, retirando de los mismos todo lo que no sea imprescindible. Además, se desaconseja no utilizar el ascensor en el caso de locales de acceso a través de escaleras o ascensor.
En cuanto a las medidas organizativas, se establece que la estancia en el centro electoral sea la indispensable, en su caso, para la selección de la papeleta, siempre se procurara mantener la distancia de seguridad de 1,5 metros. Los miembros de las mesas, por su parte, colocarán carteles informativos con las medidas de seguridad.
En las mesas de votación se mantendrá la distancia mínima interpersonal entre el votante y los miembros de las mesas, a los que se proporcionará dos mascarillas FFP2 a cada uno de ellos para que las puedan renovar cada ocho horas. Se ventilarán los locales cada tres horas, si es posible, y se dispondrá de gel hidroalcohólico en cada una de las mesas.
Las mesas de votación se situarán a una distancia mínima de tres metros entre ellas y su longitud debe permitir mantener la separación de 1,5 metros entre sus miembros. Cada mesa tendrá un producto viricida adecuado y con toallas de papel desechable. Cada miembro de la mesa utilizará su propio bolígrafo o material de oficina.
Los votantes colocarán su documento identificativo sobre una bandeja con la foto hacia arriba, mostrarán el sobre a los miembros de la mesa, que no tocarán el documento en ningún caso. Solo podrá haber una persona votando en casa mesa.
Durante el recuento, los miembros de las mesas tendrán la mascarilla FFP2 y guantes de un solo uso. Si la sala dispone de ventanas, se mantendrán abiertas y se garantizará el aforo de tres metros cuadrados por persona y una distancia de seguridad de 1,5 metros.
