La Sección Sindical de CC.OO en Ponferrada pide al Gobierno que tome partido para salvaguardar la pervivencia de la central térmicas de Cubillos, que pasa porque Endesa acometa las inversiones necesarias que adapten las instalaciones a la nueva normativa Europea de emisiones. Para el sindicato, el Ejecutivo “no debe permitir el desmantelamiento de un sector esencial que garantiza la suficiencia estratégica en materia de energía”.
Desde el sindicato lamentan también que el nuevo consejero delegado de Endesa, José Bogas, “no haya desvelado”, en la videoconferencia retransmitida desde el canal de Endesa a todos los centros de trabajo en España, los planes de viabilidad con respecto a la central térmica de Compostilla.
Sin embargo, según puntualizan desde CCOO, Bogas sí que dejó bien claro que “la inversión de carácter medioambiental que la planta debe acometer para adaptarse a la directiva europea sobre emisiones de grandes centros de combustión, en la planta de Compostilla y en la de Andorra, está supeditada a un marco regulatorio favorable para la combustión de carbón nacional”.
Asimismo, señalan que el plan industrial de Endesa para el período 2014-2016, prevé inversiones por valor de 2.500 millones de euros para el mercado ibérico, nuevo foco de la compañía tras vender a ENEL a sus activos en Latinoamérica, “pero deja en 'stand by' y fuera del plan de inversiones 2014-2016, la decisión con respecto a Andorra y Compostilla II, que funcionan fundamentalmente, con mineral nacional”.
El propio Gobierno, en respuesta escrita a una pregunta a la mesa del Senado el pasado mes de septiembre, insistía en que a adaptación de la normativa europea sólo deja una doble vía, o la inclusión en el Plan transitorio (que irá reduciendo las toneladas/año de emisiones) o la Exención por vida útil, que no limita las emisiones pero sí las horas de generación a 17.500 hasta 2023, año en que tendrían que apagar los grupos.
En conclusión, si centrales como Compostilla II sigue sin emplear su moratoria para adaptar sus grupos a la normativa de emisiones -cuya inversión estimada ronda los 200 millones de euros- entraría en la vía de la Vida Útil Limitada, y sólo entraría a producir en 17.500 horas hara 2023 "lo que supondría el cierre de la planta al cabo de este periodo”, recuerda CC.OO.