Casi 1.300 vecinos de distintos municipios de la comarca del Bierzo se sumaron en los últimos tres días a una plataforma ciudadana creada en la red social Facebook desde la que se ofrece ayuda a personas mayores o en riesgo de varias zonas de la comarca con el objetivo de evitar que tengan que salir de casa para hacer la compra, ir a la farmacia o pasear al perro. La impulsora de la Plataforma de ayuda Covid-19 del Bierzo, Valerie Martínez, explicó que “lo importante ahora es que la gente que necesite esa ayuda se entere de que existe la plataforma”.
Emocionada por la respuesta y la solidaridad de sus vecinos, Martínez subrayó la importancia de este tipo de iniciativas en un territorio con las características demográficas de la comarca berciana, con “pueblos apartados con mucha gente mayor”. “No inventé nada, lo vi en Marbella y me pareció una idea estupenda para aplicar aquí”, explica Martínez, que valora que algunos voluntarios también se hayan ofrecido a impartir clases ‘online’ de piano, zumba o pilates. “Queremos que la gente se divierta durante el confinamiento”, afirma la impulsora del colectivo.
Por el momento, la mayoría de los miembros de la plataforma residen en los distintos barrios de Ponferrada y en las localidades que conforman el término municipal, pero también hay voluntarios en otros municipios como Cacabelos, Corullón, Camponaraya, Villafranca, Toreno, Cubillos, Cabañas Raras, Carracedelo, Borrenes o Vega de Espinareda. Organizados a través de un chat de ‘whatsapp’, los voluntarios disponen de protocolos en los que se hace hincapié en las medidas de asepsia necesarias para poder ayudar sin riesgo.
Además, el grupo también cuenta con el apoyo de varios profesionales sanitarios que se han ofrecido para resolver pequeñas consultas médicas de manera telefónica y una de sus primeras acciones conjuntas invita a “hacer algo útil para el Bierzo” y a “combatir el aburrimiento” asociado al confinamiento preventivo cosiendo mascarillas a partir de tela de algodón.
En ese sentido, el llamamiento se hace extensivo tanto a las personas que sepan coser como a las que puedan ceder los materiales necesarios, que son cintas elásticas de algodón y tela del mismo tejido, que puede proceder de sábanas viejas. También se buscan tintorerías o lavanderías donde las mascarillas confeccionadas se puedan lavar a altas temperaturas, entre 65 y 90 grados.
Por último, la plataforma está contactando con personas que puedan distribuir el material entre profesionales como taxistas o repartidores y en establecimientos como panaderías o supermercados. En sus mensajes, el grupo recalca que “este tipo de mascarillas no evita el contagio con un enfermo”, pero subraya que “van a ser de gran ayuda” durante las próximas semanas.