La lluvia protagonizó el comienzo de la Semana Santa en Ponferrada para suspender las procesiones infantil y de la Dolorosa y mantener la incertidumbre en La Placa. Pero dejó paso al sol para bendecir la popular procesión y bendición de las palmas, más conocida como la Borriquilla, en el Domingo de Ramos.
Organizada por la Cofradía de Jesús Nazareno del Silencio, la procesión parte tras la correspondiente bendición de la Iglesia de San Pedro en dirección a la Plaza del Cristo para proseguir por Juan de Lama, Alfonso X el Sabio, Ortega y Gasset, Plaza Luis del Olmo y Pérez Colino hasta regresar al templo.
Cientos de ponferradinos, bercianos y visitantes acudieron de nuevo a la cita. Cofrades de Jesús Nazareno del Silencio portaron el paso de la Entrada Triunfal en Jerusalén.
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Fotos de César Sánchez / ICAL
