Entre esas medidas destaca el diseño de un plan nacional flexible para cada país, donde el carbón pueda mantenerse en el mix energético, y que recoja el impacto social y económico en los territorios, así como las políticas a instrumentalizar para la creación de empleos alternativos en las comarcas.
En la reunión, países que ya constituyeron su equipo de trabajo, como República Checa, Rumanía, Alemania, Polonia y Estonia expusieron las estrategias que van a seguir para desarrollar la transición energética en sus territorios. En el caso español, si bien aún no se ha creado un equipo de trabajo sobre la cuestión, estuvieron presentes representantes de las distintas administraciones y responsables sindicales y de la patronal.
Así, asistieron al encuentro Laura Martin como asesora del Ministerio para la Transición Ecológica, la Directora General de Minería en Asturias, Belarmina Díaz y su homólogo en Castilla y León, Ricardo González y una representación del Gobierno de Aragón. También estuvieron presentes los sindicalistas Víctor Fernández de UGT y José Luis Alperi de Soma-Fitag-UGT; de Carbunión (patronal del sector) y de la empresa hullera Hunosa.
La Comisión Europea estuvo representada en el encuentro por Marc Lemaitre (Director General, DG Regio); Klaus-Dieter Borchardt (Director Internal Energy Market, DG Energy) y Paula Pinho (Jefa de la Unidad de Coordinación de Política Energética de la Comisión Europea).
En su ponencia sobre transición energética justa para los territorios mineros, Paula Pinho, Jefa de la Unidad de Coordinación de Política Energética de la Comisión aclaró que a cada país se le pide que presente hasta final de año un primer proyecto de plan nacional que diseñe el mix energético de aquí a 2030 que será estudiado de forma individual y colectiva y sobre el que se pronunciará en un plazo de seis meses.
Cuando se presenten las recomendaciones se abrirá un periodo de consulta (hasta finales de 2019) en la que tendrán voz y voto las regiones implicadas y durante el que los gobiernos nacionales tendrá que preparar su estrategia teniendo “muy en cuenta” la consulta pública a los territorios afectados.
Por su parte, Marc Lemaitre (Director General, DG Regio) y Klaus-Dieter Borchardt (Director Internal Energy Market, DG Energy) incidieron en que cada país tiene que diseñar un plan flexible que refleje cómo se va a hacer esa transición, si se va a mantener o no el uso del carbón, y las políticas y medidas que piensa movilizar para asegurar la transición justa. El plan debe recoger el impacto social en términos de empleo de los cierres que se planteen y las políticas de creación de nuevos empleos alternativos.
Finalmente, en respuesta a la intervención de Víctor Fernández, quien reflexionó sobre la forma en la que hacer una transición justa en las regiones mineras, Klaus-Dieter Borchardt precisó que “no se puede hacer liquidando primero lo que hay y luego ya veremos qué hacemos, eso sería una catástrofe. Si hay que desmantelar algo que sea poco a poco e implementando las medidas que vayan creando empleo”.
“La comisión tiene muy presente los objetivos climáticos pero quiere hacer una transición justa en la que estén de acuerdo los habitantes de las cuencas. La comisión no exige cierres ni de minas ni de térmicas en ninguna fecha concreta, cada país tiene que adaptarlo a su realidad”, añadió.