La eurodiputada Iratxe García confirmó este lunes que ha puesto su cargo de presidenta de la Delegación Socialista Española en el Parlamento Europeo a disposición de la gestora, aunque afirmó que su decisión es “irrevocable” y seguirá sólo como europarlamentaria, representación que ejerce desde 2014.
García explicó que pensaba que los cambios se iban a realizar hoy, pero indicó que su decisión es “irrevocable” y no seguiría en caso de que se la ofreciera continuar en ese puesto, por coherencia con quien la nombró.
“Asumí una responsabilidad propuesta por una dirección que no está, por coherencia entiendo que tiene que ser otra persona” la que asuma el cargo de jefa de la Delegación de los socialista en el Parlamento Europeo, declaró a Ical la eurodiputada, que se posicionó a favor de Pedro Sánchez en el Comité Federal.
García, que ha estado dos años como presidenta de la Delegación Socialista Española en el Parlamento Europeo, explicó que ha sido una “etapa muy intensa” en un momento en que Europa está “inmersa en una crisis de definición del proyecto político”. “Ha sido una etapa apasionante desde el punto de vista político de ver las grandes desafíos y la necesidad de un proyecto europeo”, aseveró.
No obstante, subrayó que desde que es eurodiputada ha trabajado con “empeño, dedicación y ganas” y afirmó que en esa línea seguirá, aunque no como jefe de la delegación socialista, pero sí como presidenta de la Comisión de la Mujer o como miembro de la comisión de política regional. Además, añadió que “siempre pendiente de los problemas de Castilla y León”.