Foto: César Sánchez / ICALAsí lo ha confirmado el vicepresidente y portavoz de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea, que ha asegurado que esperan poder eliminar el uso de la mascarilla en exteriores, "salvo en concentraciones masivas", desde julio.
Parece que la relajación de las medidas contra el Covid está ligada al ritmo de vacunación así como a los datos de la comunidad. La semana pasada la consejera de Sanidad, Veronica Casado, comento la idea de dejar de lado la mascarilla en exteriores aunque apostó por recomendar el uso de la mascarilla y, sobre todo, en los sitios interiores, incluidos en los domicilios. No en vano, señaló que muchos de los brotes detectados siguen siendo familiares y mixtos, por lo que la mascarilla es necesario cuando se va a visitar a otra persona de la familia, siempre y cuando no forme parte de la unidad familiar de convivencia. "Más adelante, cuando se vea que esto avance, lo podremos ir reduciendo", sentenció.
Durante su comparecencia ante los medios de comunicación para informar sobre la actualidad epidemiológica en Castilla y León, Casado reconoció que si las "cosas" siguen así, con el actual ritmo de vacunación, no aumentan los ingresos y disminuye el número de críticos en las UCIs se puede "plantear" en "algunos" exteriores y en "determinadas" circunstancias limitar el uso de la mascarilla. "Es evidente que si uno camina por el campo no sea necesaria la mascarilla", declaró.
Asimismo, cabe recordar que otras personalidades relevantes nacionales se han pronunciado sobre el tema de la mascarilla, como Fernando Simón que aseguró que “es posible” que el uso de la mascarilla “en algunos lugares”, como los espacios al aire libre, “deje de ser obligatorio a mediados o finales de junio y, desde luego, durante el mes de julio”.