Foto: Ricardo Muñoz / ICALEl consejero de Cultura y Turismo, Javier Ortega, consideró este martes “probable” que Castilla y León pase el próximo jueves, 17 de junio, a nivel uno de alerta sanitaria, lo que supondrá “un respiro”, en palabras del consejero. La decisión podría tomarse en la reunión del Consejo de Gobierno de la Junta este jueves.
Ortega apuntó que el ejecutivo autonómico sabe que “la vacunación está funcionando muy bien”, de manera que “el nivel de inmunización está siendo cada vez más alto”. Asimismo, resaltó que “los hospitales tienen menos ingresos en UCI y menos ingresos hospitalarios”, así como que “la balanza ha cambiado”, de manera que “los ingresos ahora son de gente joven”, lo que “no conlleva un agravamiento de la situación”. Estos datos, para el consejero de Cultura y Turismo, “dan muchas esperanzas de que la situación ya no es reversible”.
Recordemos que la Comunidad pasó a nivel 2 de alerta sanitaria el pasado 4 de junio. Según el último Acuerdo aprobado por la Junta respecto a la alerta sanitaria, el nivel 1 corresponde a riesgo ‘bajo’, con brotes complejos o transmisión comunitaria limitada.
Si bien el paso a nivel 1 supondría una ‘relajación’ en las restricciones a nivel general en diferentes ámbitos, tal y como ha ocurrido en anteriores cambios de nivel, el mayor cambio se produciría para los establecimientos de hostelería y restauración. Y es que en nivel 1 podría retomarse el consumo en barra y el aforo en los establecimientos pasaría al 75%, con una limitación máxima por mesa de 25 personas en el interior de los locales.
En el caso de las terrazas, en el nivel 1 no habría límite de aforo en las mesas permitidas en el año inmediatamente anterior en base a la correspondiente licencia municipal y, aunque no se permitiría el consumo de pie, la ocupación máxima sería de 25 personas por mesa.
En el caso de velatorios, en el nivel 1 el aforo máximo sería del 75% en espacios cerrados. Número máximo de integrantes de la comitiva de 75 personas entre familiares y allegados, además de, en su caso, la persona que oficie el acto de despedida del difunto; todo ello, siempre que se pueda garantizar la distancia de seguridad y una adecuada ventilación. En espacios abiertos no se establecen otras limitaciones que las derivadas de garantizar la distancia de seguridad
Para ceremonias nupciales, religiosas o civiles, y celebraciones similares en otro tipo de espacio que difiera de lugares de culto, el aforo sería del 50% en espacios cerrados y del 75% al aire libre.
Actividades en academias, autoescuelas y centros privados de enseñanza no reglada y centros de formación tendrían un aforo del 75%. Para alojamientos turísticos hoteleros, la ocupación sería del 75%. Sin embargo, para casas rurales y viviendas de uso turístico, el número de personas alojadas sería el que el establecimiento tenga autorizado por el órgano competente en materia de turismo, sin superar en ningún caso dos grupos de convivencia estable. Para albergues turísticos se aplicaría el aforo del 75%. En el caso de actividades de animación o clases grupales, el aforo sería de 25 personas, incluidos los monitores.
Los cines, teatros, auditorios y circos tendrían un aforo del 75% con una distancia mínima entre asientos de 1,5 metros. En su caso, para espacios tales como bibliotecas, archivos, museos y salas de exposiciones y monumentos supondría el fin de las restricciones de aforos.
Por su parte, para la actividad física y deportiva no oficial en instalaciones deportivas y centros deportivos, el aforo máximo sería del 80% en espacios al aire libre y del 75% en lugares cerrados. Para actividades colectivas o grupales, límite máximo de 25 personas en instalaciones cerradas y 30 al aire libre, incluidos los monitores, y control de acceso a vestuarios y duchas para asegurar las medidas de distancia e higiene y prevención.