La Junta y el PP de León exigen alternativas industriales en las cuencas mineras "porque el preacuerdo acarrea paro y despoblación"

La consejera de Economía y Hacienda pide actividad “para que la gente pueda vivir donde quiera”

17 de Octubre de 2018
Actualizado: 18 de Octubre de 2018 a las 17:14
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La consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, exigió este miércoles al Gobierno central alternativas industriales para las cuencas mineras, tras conocer el preacuerdo alcanzado entre el sector minero de CCOO y UGT y los responsables del Ministerio para la Transición Ecológica a última hora del martes.

Del Olmo consideró que lo que expone el documento previo, que aún no ha sido notificado a la Junta, “va a suponer el fin del carbón” en Castilla y León. Por ello, pidió salidas industriales, como el Plan de Dinamización de Municipios Mineros de la Administración autonómica, para evitar que cerca de 10.000 kilómetros cuadrados de Castilla y León se queden sin actividad “en base a este acuerdo”.

“Pido que traigan a esa zona empresas industriales con 2.000 trabajadores para que la gente pueda vivir donde quiera”, porque hasta ahora, añadió, “lo único que han hecho ha sido poner palos en las ruedas a la minería del carbón”. “Si no, vamos a tener menos actividad, menos empleo y despoblación”.

Del Olmo, que reconoció que en el preacuerdo se mantiene Unosa, ironizó que parece ser que el carbón que se financia con fondos públicos contamina menos que el que se financia por parte de las empresas privadas. “Mi valoración negativa, no contempla en absoluto nada en relación con las términas, ni obligan a que estas compren el carbón autóctono”, sentenció.

El PP de León ve con preocupación el preacuerdo porque “no plantea ningún plan de reindustrialización”

El preacuerdo alcanzado entre el Ministerio de Transición Ecológica ylos sindicatos preocupa al Partido Popular de León, según lo manifestó este miércoles el presidente provincial, Juan Martínez Majo.

Aunque expresó su satisfacción por el plan social y las medidas que contempla para dar cobertura a los trabajadores del sector con prejubilaciones o bajas indemnizadas añadió que le preocupa “bastante” que el texto acordardo no plantee “ningún plan de reindustrialización o de futuro” para las zonas afectadas por el cese de la actividad minera.

Preacuerdo

El preacuerdo, que lleva la firma del secretario de Estado de Energía, José Domínguez Abascal, incluye un plan de restauración de explotaciones cerradas para los próximos seis años y contempla la existencia de medidas excepcionales para las empresas que continúen activas hasta 2025.

En ese sentido, el texto apuesta por el “uso de carbón autóctono competitivo” aunque reconoce la necesidad de impulsar un programa de reactivación de las comarcas mineras para los próximos ocho años. Al respecto, los sindicatos arrancaron un compromiso para poner en marcha un plan de desarrollo de energías renovables y eficiencia energética hasta 2023, así como el apoyo del Ejecutivo a las nuevas tecnologías a través de diversas iniciativas en el seno de la Fundación Ciudad de la Energía (Ciuden), con sede en Ponferrada.

Igualmente, el acuerdo establece la creación de ayudas medioambientales para la clausura de explotaciones y remarca la “participación prioritaria” que deben tener los trabajadores excedentes en esas tareas de restauración, gracias a una bolsa de trabajo específica que se gestionará desde el Instituto para la Reestructuración de la Minería del Carbón (IRMC).

Por último, en el aspecto social, el documento estipula la posibilidad de que los trabajadores de plantilla se acojan a bajas indemnizadas o a los procesos de prejubilación. En este sentido, los empleados podrán optar por esta posibilidad a partir de los 48 años de edad y recibirán el 72 por ciento de su salario. En su último punto, el preacuerdo establece la creación de una comisión de seguimiento para comprobar que los puntos acordados se llevan a efecto.