La idea es que la iluminación de los monumentos evoque el recorrido que realizan los peregrinos en el Camino de Santiago, culminando en la catedral de Santiago, con la iluminación de la torre del Reloj. Desde el pasado 22 al 25 de diciembre fue el turno del Monasterio de San Juan de Ortega; la Iglesia de San Juan en Castrojeriz y la Catedral de Burgos. Del 26 al 28 de diciembre le tocó a San Martín de Frómista; a la Iglesia de Nuestra Señora de Belén, en Carrión de los Condes y a la Iglesia Santa María la Blanca, en Villalcazar de Sirga. Por último, del 29 al 31 de diciembre se iluminarán el Hostal San Marcos, en León; la Iglesia de San Lorenzo, en Sahagún; el Palacio Episcopal, de Astorga; y la Puerta del Perdón, en Villafranca del Bierzo.
Cabe destacar que la Puerta del Perdón de Villafranca es el único templo del Camino de Santiago donde los peregrinos pueden obtener la indulgencia plenaria, además claro de en la Catedral de Santiago de Compostela, donde yace la tumba del Apóstol. El Jubileo se concede a quienes no pueden completar la ruta hasta la capital gallega por motivos de enfermedad. Precisamente en este sentido, el próximo jueves 31 de diciembre tendrá lugar un acontecimiento histórico: la apertura de la Puerta del Perdón con motivo del Año Santo, diez años después de la última vez.
Si bien en 2010 la apertura de este portón acogió a miles de fieles, en este 2020 las circunstancias de la pandemia llevarán a un acto reducido, con la presencia simbólica de algunas autoridades y con absoluto respeto a las normas de seguridad. En cualquier caso, la Junta de Castilla y León presentó un ambicioso programa para el Año Jacobeo, con un presupuesto de seis millones de euros, donde la cultura en torno al paso de esta ruta sagrada por nuestra Comunidad es la gran protagonista.
