Movidos por la cordura y por la necesidad de llegar a un acuerdo con el Ayuntamiento, finalmente, los vendedores cumplirán esta semana "porque esperamos tener un encuentro con un técnico para poder abordar el asunto", pero si no hay ninguna novedad, "volveremos a proponernos no montar los puestos a partir del miércoles", indican a este periódico.
No obstante, y a pesar de ese optimismo por conseguir permanecer en el mismo sitio de siempre, todo apunta a que el equipo de Gobierno no dará su brazo a torcer en esta ocasión "porque seguiremos adelante la reorganización prevista los espacios", aseguró el edil de Comercio, Carlos Fernández. Esta decisión ha sido tomada para evitar los bloqueos a las entradas de locales y viviendas y para tener controlados el número de stands y poner de una vez al corriente los pagos, teniendo en cuenta que hay una deuda acumulada por parte de muchos comerciantes que asciende a 50.000 euros.
Sobre el aviso de los vendedores de no acudir al Mercado de Abastos, Fernández ha señalado que están "en su pleno derecho de no hacerlo", pero el equipo de Gobierno ya ha decidido marcar con una placa y un número el sitio que cada comerciante debe ocupar. Es más, "el miércoles pasado yo mismo recorrí el mercado para ir informando a cada propietario de los puestos de su nueva ubicación". "La mitad de ellos", especifica, "estaban de acuerdo" con disponer esos 50 centímetros de cada lado. "A ver si convencemos a la otra mitad", añadió.