La nueva junta directiva de la comunidad de regantes del canal bajo del Bierzo se reunirá la semana próxima con responsables de la Junta. Después de perder las inversiones europeas por falta de acuerdo con los Ayuntamientos, el plan Agro de la administración autonómica se presente como una nueva posibilidad de retomar el proyecto.
Su presidente, Argimiro Martínez, considera que quizá sea la última opción de encarar la modernización de esta infraestructura, que cada año exige notables inversiones de los regantes para 'remendar' las filtraciones y pérdidas de caudal, en un horizonte cercano.
La próxima semana miembros de la junta directiva se desplazarán a Valladolid para mantener una reunión con el director general de Política Agraria Comunitaria de la Junta de Castilla y León, Pedro Medina Rebollo. El objetivo es lograr que esta modernización del canal bajo se encaje en el plan de modernización del agro de la Comunidad, que se desarrollará desde 2020 y que en este momento se encuentra en fase de elaborar el listado de intervenciones objetivo.
Según ha transmitido ya en contactos previos la Junta, estos procesos serían prioritarios en las zonas en las que se hayan desarrollado procesos de concentración parcelria. Precisamente en la Comarca, en esta zona de canal bajo, la concentración está remantándose en un proceso anhelado desde hace varias décadas. En torno al cincuenta por ciento de los terrenos susceptibles ser regados han sido ya concentrados en zonas como Carracedelo y Camponaraya.
El proyecto sí estaba incluido en el listado de fondos FEDER 2014 pero que el Ministerio sacó del mismo la infraestructura tras la falta de acuerdo entre regantes y Ayuntamientos sobre el reparte de costes en el tramo urbano.
En una reedición de los fondos 2015-2020 la sociedad pública AcuaES descartó incluirla en el listado a remitir a Europa, lo que cerraba la puerta a una obra que estaba cuantificada en 27 millones de euros y que al 80% se financiaba por estos planes comunitarios.
La modernización permitiría mejorar los 400 kilómetros de canal y acequias de riego de las cerca de 4.000 hectáreas que transcurren entre los municipios de Ponferrada, Camponaraya y Carracedelo. Además en el tramo urbano de la capital berciana, en Compostilla y Cuatrovientos, el canal quedaría soterrado.