Las acciones sindicales comenzaron en 2018 con la irrupción de delegados de las tres secciones sindicales en eventos clave de Endesa, como la presentación de la Liga Endesa y protestas ante el despacho del director de Recursos Humanos, el italiano Andrea Lo Faso. Ha habido multitudinarias manifestaciones que han sumado entre todas más de diez mil personas, delante de la embajada de Italia en Madrid y coincidiendo con la celebración de las Juntas Generales de Accionistas de 2018 y 2019. El pasado 12 de abril de 2019, la plantilla se sumó de forma mayoritaria a una huelga convocada por las tres secciones sindicales.
Para CCOO, UGT y SIE, estos dos largos años de negociación "han servido para quitarle la máscara a la dirección, que se presentó a ella con equívocas propuestas de modernización y flexibilidad. El paso del tiempo ha demostrado que solamente buscaban un mayor beneficio para la empresa a costa de las condiciones laborales y los derechos de quienes lo hacen posible", según informan en un comunicado.
Para las tres secciones sindicales, la actitud de la dirección de Endesa "es de un total menosprecio hacia los trabajadores y las trabajadoras y su talante, prepotente. En una reunión de la semana
pasada con los tres secretarios generales, Andrea Lo Faso alardeó sin tapujos de su posición de fuerza con una postura inamovible e inaceptable para los sindicatos: o se convierten en brazo
ejecutor cómplice que liquide sus compromisos con el personal jubilado y prejubilado de la compañía, o no habrá convenio para los activos".