Mediaset ficha al graffitero afincado en Ponferrada, Asier Vera

La cadena infantil Boing ficha al graffitero de moda en Ponferrada, Asier Vera, para diseñar los grafismos de su nuevo programa, 'Selfie Show', que está previsto se estrene en abril. Vera se hizo popular por sus grandes murales en la capital berciana.

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Fundador, CEO de InfoBierzo e InfoLeon
22 de Marzo de 2015
Actualizado: 29 de Marzo de 2015 a las 22:58
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20150322_003 Asier Vera en su estudio de Ponferrada (César Sánchez)

 

Asier Vera es 'graffitero' y lleva todo un año vistiendo con su artísticas pintadas muros y fachadas de Ponferrada, a donde llegó por amor y cansado del estrés de la capital madrileña. Tras revolucionar y dar un nuevo sentido a este arte urbano en la ciudad berciana, con sus originales graffitis, cargados siempre de mucho sentido, ahora, la cadena infantil Boing -del grupo Mediaset- le ha fichado para diseñar los grafismos, animaciones, ráfagas y cortinillas de un nuevo programa, 'Selfie Show', que está previsto que se estrene en abril.

“Es un programa nuevo, que quieren estrenar el mes que viene, con cortes de videos graciosos con niños”, cuenta Vera, que explica que él se encarga de diseñar y desarrollar todos los grafismos que aparecerán en este espacio televisivo. Un encargo que le permite trabajar desde casa, donde cada noche dedica varias horas a la creación de cabeceras, cortinillas, pastillas y logos. “Ellos me transmiten lo que quieren y yo intento plasmarlo con mi estilo; hay veces que a la primera sale todo rodado y otras veces hay cosas que cuestan algo más”, añadió el artista.

Así, explica que no puede adelantar los diseños, ya que el programa aún no se ha estrenado. Sí cuenta, por ejemplo, que en la cabecera quieren transmitir como si el programa fuera un 'late night show' (un programa de final de la noche) americano -tipo al 'Saturday Night Live' o el programa de Jay Leno o Jimmy Fallon- “pero con la estética gamberra que tiene la cadena, por el público joven al que va dirigido y teniendo en cuenta cuál es el contenido del programa, que no tiene realmente las características de un late show”.

“Querían un escenario neutro, que tuviese 3D en las tipografías y los números de los rankings, que tuviese también un poco estética de aplicación de móvil, que las cortinillas y las ráfagas recogieran algún gesto con la mano, como deslizándose por la pantalla, para cambiar de plano”, añade este artista urbano, que ha conseguido este trabajo gracias a los contactos que tenía en Madrid, cuando trabajaba como diseñador gráfico en un productora audiovisual, antes de trasladarse a la capital berciana.

Asier Vera durante el pintado de sus murales

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De Madrid a Ponferrada

Asier Vera nació en Donosti pero, con apenas tres años, se fue a vivir a Madrid. Diseñador digital de profesión y escritor de graffiti como devoción, llegó a Ponferrada hace algo más de un año y convirtió su devoción en su profesión, en su principal medio de vida. “Cuando me vine aquí, visité las pocas productoras audiovisuales que había y ninguna quiso contar con mi trabajo, que no necesitaban gente. Entonces me planteé ¿y que hago ahora?. Decidí ir al Ayuntamiento y les pedí que me dejaran pintar, que me dieran permiso para pintar, me quería hace publicidad, que la gente viera lo que algo y que me pudiera salir trabajo para decorar fachadas o lo que fuese”, recuerda.

Y funcionó, desde el primer graffiti en el Consejo de la Juventud con un rostro femenino, mezcla de diferentes razas, con el mensaje 'La única raza es la humana', al mural del Mundial de Ciclismo en el antiguo Carrefour y el ciclista con E.T. y el lema 'Lo importante no es la meta sino el esfuerzo para llegar a ella'. Las pintadas dejaron de verse como algo sucio, para integrarse en la ciudad y ser valoradas como algo estético y decorativo, llevando a muchas personas incluso a llamar al Consistorio para ofrecer directamente sus tristes y agrietadas fachadas medianeras o muros grises para que Asier Vera los alegrara con mensajes positivos y optimistas, escritos a golpe de spray.

“La acogida que he tenido ha sido buena, no esperaba que iba a ser así. Siempre va a haber detractores, pero la gran mayoría de comentarios han sido bastante buenos”, explica Vera, que entiende el graffiti como arte, en toda su amplitud, desde utilizar metros y metros de muros para sus “cuadros” callejeros a llegar a exponer en París (Francia), dentro de la exposición colectiva '400 ml Proyect', una creación con un bote de spray como elemento central. “Un coleccionista de arte vio el tirón que tenia el arte urbano y nos propuso a escritores de graffiti de decenas de países de todos los continentes que 'tuneásemos' un bote de spray a nuestra manera. Yo clavé un bote de spray sobre una cruz de madera, que mi padre había hecho para mi madre cuando eran novios, y que representaba la muerte del graffiti, crucificado”, explica.

20150322_002 Asier Vera en su estudio (César Sánchez)

 

Siempre pintando

A pesar de estar ahora más centrado en su faceta de diseñador -además del encargo para Boing también está haciendo una suplencia en un empresa que trabaja para Telefónica-, Asier Vera asegura que siempre está pintando. “Siempre estoy pintando o pensando en cosas que pintar, me sirve también para canalizar la mala leche, es mi terapia, aunque no lo haga en grandes fachadas o no se vea”, defiende el graffitero, que sigue teniendo varias “pintadas” pendientes, como el encargo realizado por la SD Ponferradina para el Estadio del Toralín o el del Ayuntamiento de Villafranca del Bierzo para que un retrato, con su característico bigote, de Joaquín Miguélez 'Quini' ocupe toda la fachada del pabellón que lleva su nombre.

También está pendiente otro mural en la capital berciana, cuya temática será sobre el Camino de Santiago. Precisamente, Vera tiene en mente otro proyecto para que sus graffitis “guíen” también a los peregrinos que hacen la ruta Jacobea. “Tengo que empezar a moverlo, mi idea es hablar con los ayuntamientos por los que pasa el Camino y pedir que me cediesen un pared en la que pintar algo relacionado con esos pueblos, haciendo el recorrido más atractivo, algo más que ver” explica Vera, que insiste en que seguirá 'graffiteando' porque es su modo de vida. Y es que si Descartes hubiera nacido unos cuantos siglos después y hubiera conocido a estos artistas urbanos, probablemente habría cambiado su reflexión por la de “pinto, luego existo”.

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