El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez Quiñones, afirmó este miércoles al término de la Comisión de Vivienda, integrada en el Diálogo Social, que la intención de la Junta se centra en poder aumentar las ayudas para rehabilitación que, como añadido, dijo, suponen un “tractor económico” para el sector constructivo. Para ello, recordó, en el proyecto de presupuestos de la Comunidad de 2018 “hay contempladas partidas suficientes que se añadirán a las del Gobierno estatal”.
“Las cuantías por nuestra parte no van a ser aportaciones menores a las que se han venido consolidando en esta legislatura ni en alquiler ni para rehabilitar, pero antes se debe publicar el Real Decreto del nuevo Plan Estatal de Vivienda 20018-2021”, añadió en declaraciones recogidas por Ical. A su vez recordó que en la convocatoria de 2015 el presupuesto era de poco más de 1,8 millones euros, y en 2017 se pasó a los casi 7,3 millones, con casi 200.000 euros más que en 2016.
También señaló que en la convocatoria de 2018 una de las novedades será la inclusión en las ayudas de rehabilitación la de la vivienda unifamiliar, con el fin de ayudar a fijar población en el medio rural y la creación de riqueza económica. “La Mesa del Diálogo Social ha sido actora en las propuestas a nivel estatal en la modificación del Plan Estatal de Vivienda. Hay que pensar, por ejemplo, en casas de pueblo donde viven una o dos personas y que tienen algún defecto de accesibilidad o una bañera, ganándose en confortabilidad y en vivienda digna”, aseveró.
Suárez Quiñones comunicó al término de la reunión de la Comisión de Vivienda que mañana se publicará en el Boletín Oficial de la Comunidad (Bocyl) la relación de los 110 beneficiarios -99 comunidades de propietarios y otros once edificios de propietarios únicos- con 2.705 viviendas y locales como destinatarios, cuyos proyectos han sido seleccionados en concurrencia competitiva con los 303 presentados en 2017, donde como novedad se podían solicitar ayudas para obras ya en ejecución. Las actuaciones en los edificios se dirigían a su conservación, mejora de la eficiencia energética y ajustes en materia de accesibilidad.
Duplicación de subvenciones
Los beneficiarios en rehabilitación edificatoria han podido recibir este año un máximo de 8.800 euros por vivienda, lo que supone duplicar el importe máximo de la ayuda ofrecida en la convocatoria anterior, que era de 4.400 euros. Además, se ha incrementado el 100 por 100 de la cuantía individual para mejoras de la sosteniblidad, al llegar 1.600 euros, así como las de accesibilidad hasta los 3.200 euros.
Tal y como señaló el consejero de Fomento y Medio Ambiente se ha tratado de rehabilitar vivienda “con criterios objetivos” y que, además de mejorar la calidad de vida de una parte importante de población, “se ayude a mejorar a pequeñas y medianas empresas dañadas durante los años de la crisis por la caída sobre todo en la construcción de vivienda nueva”. Así, expuso que de cada millón de euros invertido en rehabilitación “se generan 60 empleos directos e indirectos”.
En esta línea indicó que aún se debe trabajar y profundizar en algunas provincias en la información y la formación sobre los beneficios de la convocatoria de rehabilitación con profesionales, arquitectos, administradores de fincas y contratistas. “Este año se cubrió la partida presupuestada en ayudas pero en 2106 quedó dinero por invertir al no presentarse proyectos suficientes”, dijo.
Por provincias las solicitudes presentadas este año fueron en Valladolid 256, seguida de Burgos (214), Salamanca (105), Palencia (74), León (72), Zamora (29), Ávila (825), Soria (22) y Segovia (16). Así, Suárez-Quiñones consideró que, en función del ámbito poblacional, las peticiones de ayuda deberían mejorar en la convocatoria de 2018 en las provincias de León, Ávila, Zamora, Soria y Segovia.
Opiniones de sindicatos y patronal
Por parte del resto de miembros de la Mesa de Vivienda integrada en el Diálogo Social, el secretario general de la Confederación de Empresarios de Castilla y León, David Esteban, consideró un “éxito” el trabajo realizado con las 110 ayudas concedidas. “Se apoya además a las pymes de un sector importante de la Comunidad y se crea empleo”, dijo, además de valorar positivamente el compromiso de la Junta para prorrogar durante dos años más las políticas de ayudas en materia de vivienda.
Inmaculada de Pablos, de Comisiones Obreras, manifestó que el Pacto de Vivienda está siendo “muy fructífero” al llevarse a cabo un seguimiento puntual de las actuaciones “y poder evaluar todo lo realizado”. Además, se congratuló de que primero fueran las ayudas para el alquiler y luego las de rehabilitación. “Todo es positivo al ejecutarse proyectos con criterios de accesibilidad y eficiencia energética que contribuyen a crear empleo en la construcción. Hay que seguir trabajando desde el Diálogo Social en la financiación de líneas de apoyo”, puntualizó.
Finalmente, Azucena Pérez, de UGT, agregó que todas las ayudas para el alquiler o la rehabilitación de viviendas tienen un destino social importante. “Están beneficiando a personas de sectores desfavorecidos, o de estatus social menor como pensionistas, además de ayudar a sostener a pymes y micropymes. También, quizás lo más importante, se está produciendo el fomento de algunos oficios”, concluyó.