En este sentido, puso de manifiesto que “no queremos” la ZBE porque es un agravio contra los vecinos, el comercio local, los autónomos y los visitantes a la ciudad. Y, en esta línea, apostó por circular con libertar por el centro de la ciudad y reclamó al equipo de gobierno del Ayuntamiento de Ponferrada que muestre a los ciudadanos los informes técnicos de la contaminación diaria de los últimos cuatro años.
Ferreiro incidió en que los socialistas junto a sus socios, y ante el pasotismo de una oposición incapaz, dócil y perezosa representada por el PP, ha comenzado las obras de la “Zona de Bajas Economías” convirtiendo una mentira de la supuesta contaminación en una falsa razón para justificar una actuación urbanística innecesaria y que provocará una tremenda brecha social en la ciudad de Ponferrada.
Así, advirtió que llevará al comercio local a un cierre lánguido, a que el pequeño autónomo se vea sometido a la pérdida de clientes, o que los aparcamientos se vean reducidos o, incluso, eliminados. “Pondrá en la picota a un importante número de profesionales autónomos que se dedican al reparto de mercancías que se verán obligados a invertir en nuevos vehículos”, señaló.
Asimismo, detalló que en España hay 150 ciudades con más de 50.000 habitantes y Ponferrada ocupa el puesto 121 en dicho ranking y muchas de ellas no la consideran necesaria. También, como una sentencia del Tribunal Superior de Justicia del Principado de Asturias que ha dejado sin la ZBE a Gijón al no contemplar en la ordenanza la memoria económica.
Por todo ello, desde UPL-Bierzo creen que su "propuesta está cargada de razones y por eso insistimos que es innecesaria una ZBE para la ciudad de Ponferrada."