Esta tendencia también se da en Castilla y León, ya que si se atiende al desglose la variación en el número de ocupados según sea el nivel de capacitación que exige cada puesto, el empleo de media y baja cualificación cae con más fuerza que el de alta.
En la Comunidad la pérdida de 27.300 puestos de trabajo (-2,7% interanual) surge de la destrucción de 3.900 empleos de alta cualificación (-1,3%), y la supresión de 23.400 puestos de trabajo del resto de categorías (-3,3%). Así, en Castilla y León la proporción de ocupados que realizan tareas directivas, técnicas, científicas o profesionales (alta cualificación) se mantiene igual que hace un año, en el 29,2%, según el Grupo Adecco.
Además un 9,7% de los ocupados en Castilla y León trabaja menos horas de las que querría, quiere ampliar su jornada o encontrar un segundo empleo y no encuentra dónde hacerlo.
Además, se encuentra nueve décimas por encima del porcentaje medio nacional (8,8%).
En relación con el número de huelgas, estas se redujeron por tercer trimestre consecutivo, con lo que 2020 acabó con un registro de 4,5 conflictos cada 100.000 empresas en Castilla y León (-63,5% interanual y su menor registro recogido en las estadísticas). Castilla y León registra una reducción de 14,3 puntos mayor que la registrada de media en todo el país (-49,2% para quedar en 8,5 huelgas cada 100.000 empresas).
La cantidad de trabajadores participantes en esas huelgas cayó aún con mayor intensidad en la Comunidad, ya que se elevó a 65,1%, es decir, en dos huelguistas cada 10.000 ocupados. En España, son 16,8 participantes (-49,7% interanual). Para Castilla y León es el mejor dato de toda la serie histórica, que la deja como la sexta comunidad con menor participación en huelgas