La Junta de Castilla y León, a través de la Consejería de Economía y Hacienda, ha dado un paso significativo para impulsar el desarrollo económico en el ámbito rural. Recientemente, se han publicado en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl) las bases reguladoras para la concesión de subvenciones dirigidas a ayuntamientos con una población inferior a 20.000 habitantes. El objetivo principal de estas ayudas es financiar la adquisición de terrenos y los gastos necesarios para su transformación en áreas industriales, fomentando así la creación de nuevas empresas y la expansión de las ya existentes.
Esta iniciativa se enmarca dentro de una estrategia más amplia para fortalecer el tejido empresarial de la región, adaptando su tamaño a las necesidades del mercado y promoviendo la innovación y la adopción de nuevas tecnologías. La Junta busca, con estas medidas, garantizar la competitividad y la sostenibilidad de las empresas locales, maximizando la generación de valor añadido y la creación de empleo en Castilla y León.
Apoyo al crecimiento empresarial y la competitividad
La Consejería de Economía y Hacienda subraya la importancia de implementar programas de apoyo a los proyectos de crecimiento empresarial. Estos programas están diseñados para asegurar que las empresas de Castilla y León puedan competir eficazmente en el mercado y mantener su actividad a largo plazo. El Instituto para la Competitividad Empresarial de Castilla y León (Icecyl) juega un papel crucial en este proceso, gestionando un extenso parque de suelo industrial distribuido por toda la región. No obstante, la creación de suelo industrial también es una prioridad para otras instituciones, tanto a nivel estatal como local.
La colaboración entre la administración regional y las entidades locales es fundamental para el desarrollo de suelo industrial que responda a las necesidades específicas de cada zona. Esta colaboración no solo facilita la creación de nuevas empresas y el autoempleo, sino que también contribuye a fijar la población en los entornos rurales, combatiendo así la despoblación.
Fomento de la actividad empresarial en el ámbito rural
La administración autonómica ha reconocido la necesidad de colaborar estrechamente con la administración local para mejorar y modernizar la oferta de suelo industrial. Esta colaboración beneficia tanto a las empresas ya establecidas en la región como a aquellas que están considerando Castilla y León como el lugar ideal para desarrollar sus proyectos industriales. En última instancia, esta iniciativa busca apoyar proyectos que sean técnica y económicamente viables, facilitando la adquisición de suelo y cubriendo los gastos asociados a la tramitación de los instrumentos urbanísticos necesarios para convertir el suelo en un área industrial.
Requisitos y condiciones para acceder a las subvenciones
Para poder optar a estas subvenciones, los ayuntamientos deben cumplir una serie de requisitos. Entre ellos, se incluyen:
- Ejecutar el proyecto y realizar la actividad que justifica la concesión de las ayudas.
- Justificar ante el Icecyl el cumplimiento de los requisitos y condiciones, así como la realización de la actividad y el cumplimiento de la finalidad de la subvención.
- Someterse a las actuaciones de comprobación que efectúe el Icecyl y otros órganos de control competentes.
- Comunicar al Icecyl la obtención de otras subvenciones, ayudas, ingresos o recursos que financien las actividades subvencionadas.
Los proyectos subvencionables incluyen la adquisición de suelo para la creación o ampliación de áreas industriales, así como la dotación de infraestructuras necesarias para estas áreas. Se consideran actuaciones subvencionables aquellas que requieran o no transformación urbanística para crear parcelas aptas para la edificación o uso independiente, conectadas funcionalmente con la red de servicios existentes. El plazo máximo de ejecución del proyecto es de dos años a partir de la fecha de la resolución de concesión, con una posible prórroga que no exceda los tres años en total.
Inversiones y gastos subvencionables
La orden establece que serán subvencionables las inversiones y gastos para la adquisición de terrenos necesarios para el desarrollo del proyecto, así como los derechos reales y de servidumbre inherentes a los mismos. La convocatoria podrá establecer un máximo de superficie o inversión por estos conceptos. Es importante destacar que el importe subvencionable de los terrenos no podrá superar su valor de mercado, y el valor de los edificios ubicados en los terrenos no será subvencionable.
La ayuda consistirá en una subvención a fondo perdido de hasta un máximo del 50 por ciento del presupuesto subvencionable aprobado. El porcentaje de subvención se determinará de acuerdo con los criterios de valoración establecidos y las disponibilidades presupuestarias. Las solicitudes se valorarán conforme a los principios de objetividad, igualdad y no discriminación, hasta un máximo de 100 puntos, y las subvenciones se tramitarán y resolverán en régimen de concurrencia competitiva.
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