El jugador de la Deportiva Ponferradina Borja Valle atendió a los medios en el marco de la visita al Área de Pediatría del Hospital del Bierzo, a los centros de Asprona Bierzo y al Colegio de Educación Especial Bergidum. Al final de las mismas, el futbolista reconoció que le tocan «mucho. Aquí nace mi hijo y es especial», recapituló el capitán del equipo berciano, que reconoció que este tipo de visitas «siempre» le han gustado porque estuvo en esa situación. «Nos acerca más a los bercianos», rubricó.
En este sentido, se felicitó por «gracias a Dios hay poquitos» enfermos y recordó que tratan de «ayudar a que salgan adelante» porque él mismo lo vivió siendo niño. «Me acuerdo que hicieron una visita rápida», dijo Valle, que explicó que este tipo de iniciativas «te hace aislarte de lo que estamos viviendo y te acercan a la realidad. Lo tenemos presente porque es nuestra vida», puntualizó el atacante blanquiazul, que tiene claro que ayuda «a dejarlo a un lado por un momento. Los niños merecen que estemos focalizados en ellos», apostilló.
Cuestionado sobre la situación deportiva del equipo, aclaró que «sólo» conoce un camino y es estar unidos. «De nada vale insultar, mirar a otro lado, remar en otra dirección», recalcó el jugador de la Deportiva, que reiteró que tiene «un objetivo claro. Estamos en la Ponferradina por algo», precisó Valle, que admitió que «las cosas no se están dando bien, han sido meses muy duros». Además, lamentó la lesión que sufrió «porque hacía tiempo que no estaba fuera del día a día con los compañeros. Intento estar lo más implicado posible», confesó.
De hecho, reconoció que se siente «impotente» al poder hacer poco y eso le genera angustia, aunque aseguró que su prioridad es estar centrado «en la recuperación y estar al 100% lo antes posible para poder ayudar». Además, no entiende las críticas por estar en el banquillo pese a no poder jugar: «Vine para ayudar a la Ponferradina. Lo único que quise transmitir estando en el banquillo es que quiero estar ahí, ayudar desde el banquillo. Hago mi trabajo», sentenció.
El difícil partido contra el Tenerife
De cara al próximo partido en el campo del líder, el Tenerife, asume que «es difícil. Lo más bonito que tiene el fútbol es que es incontrolable», aclaró Valle, que añadió que «la Ponferradina juegue contra el primero o contra el último. Estamos en una situación complicada. Ha habido un cambio y el míster sólo ha tenido tres semanas para conocernos y cambiar muchas cosas», detalló el jugador berciano, que tiene que tiene claro que «es muy precipitado, muy rápido, pero va a salir».
En este sentido, reconoció el delantero que siente «impotencia» porque el equipo viene «de un año bonito». No obstante, pidió estar «centrados en el Tenerife» y aseguró que no tiene miedo. De hecho, prefiere enfrentarse al Tenerife que a otro rival. Además, es consciente de que «nadie hubiese esperado que terminase así» después de haber sufrido «un golpe fuerte del verano. Herida difícil de cicatrizar», especificó el atacante blanquiazul, que recordó es un «proyecto nuevo» y por ello deben «olvidar el daño y darle la vuelta. Que el 2026 traiga algo positivo», deseó.
El gerente de Asistencia Sanitaria del Bierzo, Juan Ortiz de Saracho, quiso agradecer a los jugadores estar allí «para acompañar a los críos.» «No tenemos muchos ingresados y es una ventaja porque significa que nuestros chavales están bien», subrayó el dirigente, que agradeció los regalos donados y quiso «desearles muchos éxitos, que vayan hacia arriba y se posicionen» donde les gustaría que estén. «Muestran valores y transmiten salud», aseveró Ortiz, que destacó que «hacer deporte evita estar en otras situaciones».
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