El conjunto burgalés, colista en Segunda RFEF, se carga a un Primera y llega a la tercera ronda de la Copa del Rey
Raly Cabral, jugador de fútbol nacido en Bembibre, disfrutó con el pase de su equipo, la Arandina, a la tercera ronda de la Copa del Rey. El cuadro castellano, pese que es colista en el Grupo 1 de la Segunda RFEF, dio la sorpresa al superar por 2-1 al Cádiz. Los goles de Hajimari Ceesay y Jorge Pesca, que hizo el 2-1 definitivo, resolvieron la eliminatoria y desataron la locura en un encharcado Montecillo, después de que San Emeterio igualara en el primer tiempo. Cabral jugó 15 minutos al entrar en sustitución de Kevin Manzano.
Formado en las categorías inferiores del Atlético Bembibre y la Deportiva Ponferradina, Cabral a sus 26 años es un “trotamundos” del fútbol. De hecho, tras acabar su formación, en 2016 se fue al Zamora, con el que jugó una temporada el Grupo VIII de la Tercera División. A continuación, tuvo una doble experiencia en Galicia, primero en el Barco y después en el Ourense. En 2019 dio el salto a Segunda B gracias al Leioa, donde estuvo dos temporadas. Don Benito y Vélez, ambos en Segunda RFEF, fueron sus equipos antes de llegar a Aranda de Duero.
