En ese sentido, el regidor de la capital berciana reconoció que las principales alegaciones del sindicato tienen que ver con el proceso de municipalización del servicio de recaudación tributaria, aunque negó que el equipo de Gobierno esté vulnerando los derechos de información y consulta del sindicato, tal y como denunció ayer la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO. Al respecto, Ramón recordó que las centrales sindicales ya fueron informadas del proceso en sendas reuniones celebradas el 23 de enero y el 11 de febrero, pese a que la incorporación efectiva del personal de la empresa recaudadora al Ayuntamiento será objeto de negociación en su mesa correspondiente.
En la misma línea, el alcalde reiteró su “sorpresa” y “preocupación” por la presentación de estas alegaciones “a última hora” y subrayó que las alegaciones se presentaron el penúltimo día del plazo. Al respecto, cabe recordar que las cuentas municipales salieron a exposición pública el pasado 9 de marzo. Con motivo de la declaración del estado de alarma, el 16 de marzo quedó suspendido el plazo de alegaciones, una suspensión que se alzó el 28 de abril. Las alegaciones de CCOO se presentaron el 11 de mayo.
Por otro lado, Ramón reiteró que el sindicato no presentó alegaciones a los presupuestos durante los gobiernos municipales del PP hasta el año 2013, aunque sí lo hizo en los ejercicios de 2015 y 2016, y valoró el “reconocimiento sin precedentes de derechos socioeconómicos para la plantilla” que supondrá la entrada en vigor del acuerdo marco y del convenio colectivo del Consistorio, dos documentos cuya firma estaba “casi cerrada” antes de que el sindicato presentara unas “peticiones absolutamente inasumibles”, con un “incremento retributivo exponencial”.