Añaden que la decisión se ha tomado dando absoluta prioridad a la salud pública. “Si bien es cierto que las restricciones de los últimos meses han permitido la progresiva apertura de negocios y las medidas de confinamiento se han podido reducir, la amenaza de rebrote está presente y es la obligación del Ayuntamiento tratar de evitar que eso suceda”, señalan.
La feria de San Antonio supone un día de arraigada tradición que la mayoría de villafranquinos disfruta en la proximidad de la época estival pero, recalcan, “es necesario mantener el espíritu de constancia, firmeza y sacrificio que nos ha permitido avanzar, lentos pero seguros, para superar tan tediosas circunstancias en nuestro municipio”.