La DGT está llevando a cabo un intenso plan para conseguir una mejor convivencia entre todos los conductores y peatones, con ello se pretende disminuir los accidentes mortales en ciudad, así como lograr una mejor relación entre coches, motos, bicicletas, peatones... donde rebajar el límite de 50 a 30 km/h, incluso hasta a 20, ha sido una de las grandes medidas llevadas a cabo en los últimos diez años.
Este motivo de respetar los nuevos límites de velocidad establecidos implica que los badenes pierden el sentido para el que están diseñados, ¿la reducción generalizada de velocidad se traducirá en la desaparición de los badenes?
Hace unas semanas, en la presentación online de esta nueva normativa, Pere Navarro, el director de la DGT, dejó varios titulares que podrían significar la eliminación de buena parte de los badenes: “en las calles 30 no tienen sentido los badenes. Confiamos en que poco a poco veremos cómo desaparecen los badenes en estas calles de 30”.
En este sentido, desde la institución ya se estudia cómo irlos retirando de las grandes ciudades, puesto que al reducir la velocidad con estos nuevos límites, no son necesarios estos elementos tan característicos con bandas amarillas. Sin embargo, los pasos elevados para peatones, que en ciudades como Ponferrada abundan, continúan siendo un componente muy necesario porque incentivan a que el conductor respete la preferencia del peatón sobre el vehículo.