En ese sentido, Morala quiso hacerse eco de las “dudas y suspicacias” suscitadas entre los usuarios del transporte público en relación con la calidad de los medios adquiridos por el Consistorio y reclamó al equipo de Gobierno “un ejercicio de transparencia mayor del que ha hecho hasta ahora” para “aclarar” esas dudas y “garantizar hacia el futuro el buen funcionamiento del servicio y de sus medios”.
En la misma línea, el portavoz del PP en la ciudad señaló que los informes técnicos, “detallados al extremo y desglosados por prestaciones de todos los vehículos ofertados”, llevaban a considerar “equivocadas” las preferencias políticas del equipo de Gobierno. “Conviene no desoír las opiniones de los técnicos municipales especializados en transporte y movilidad, que son los que más saben de esto”, remarcó Morala, que mostró su preocupación por una decisión política que calificó de “poco equilibrada”.
Al respecto, reconoció que “la parte económica es importante y los informes financieros de los funcionarios deben tenerse muy presentes” pero destacó la relevancia de la evaluación de los criterios técnicos a la hora de comprar autobuses nuevos, “que están llamados a tener una vida útil para varios años y que cuestan un dinero importante, que pone el Ayuntamiento directamente”, subrayó.
Cabe recordar que el pasado lunes el Ayuntamiento anunció la compra de cuatro autobuses para renovar la flota del transporte público, cuya entrega está prevista para el mes de diciembre, según señalaron fuentes del Consistorio. El precio de adquisición ronda los 700.000 euros sobre un presupuesto de licitación de 900.000 euros.
Se trata de vehículos del modelo NovocitiLife, de la marca Isuzu, que comercializa la compañía Mobility Bus. Tienen ocho metros de longitud y piso bajo, lo que facilita la accesibilidad a personas con movilidad reducida. Cada autobús incluye 21 plazas sentadas y hasta 39 de pie.