Si bien en el último pleno celebrado Álvarez Courel admitió tanto su fracaso al respecto como la desidia en la gestión de la Diputación Provincial, volvió a insistir en que el origen del problema se remonta al 2016. Un argumento erróneo que demuestra el desconocimiento, por parte de un presidente con más de 7 años en el cargo, sobre un plan fundamental para nuestros pueblos, “pues el único cambio que se introdujo en 2016, tras la propuesta de Alfonso Arias al frente del SAM en ese momento y previo acuerdo firmado por todos los grupos políticos de la Diputación Provincial, fue el reparto objetivo de las obras con el objeto de que todas y cada y cada una de las juntas vecinales de la provincia tuvieran una obra al año”.
En este sentido, Arias Escuredo recuerda que ese reparto objetivo afecta a toda la provincia sin distinción y que el adelanto del setenta por ciento del dinero está establecido también para toda la provincia, por lo que no se entiende la paralización del plan en el Bierzo mientras en el resto de la provincia continúa desarrollándose normalmente. “Se da además la circunstancia de que los problemas nunca existieron hasta el inicio del actual mandato y coincidiendo curiosamente con la llegada del berciano, Eduardo Morán, a la presidencia de la Diputación Provincial”.
“Hay que recordar así mismo que toda esta acumulación de retrasos mantiene paralizada también la inversión de los remanentes del 2021”, lamenta Arias Escuredo. “Lógicamente el enfado de los pedáneos del Bierzo es mayúsculo, y también el nuestro, por lo que exigimos al gobierno socialista del Consejo Comarcal que abandone de una vez por todas su zona de confort, que coja el toro por los cuernos y que, en el ejercicio de su responsabilidad, se ponga a trabajar en serio por dar solución a un problema que parece ya enquistado y que está afectando muy seriamente al desarrollo de nuestros pueblos, al bienestar de los ciudadanos de los núcleos de población más pequeños y al funcionamiento de muchas empresas locales que están a la espera de poder empezar a trabajar, en unos casos, y de cobrar el trabajo realizado, en otros.
