La Junta cede al Consorcio del Ponfeblino las instalaciones de la vertiente lacianiega para que inicien su explotación socio-económica

El consejero subraya el “carácter técnico” de una decisión que contará con informes externos

30 de Julio de 2019
Actualizado: 05 de Agosto de 2019 a las 11:01
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El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez Quiñones (C), durante su reunión con representantes del Consejo Comarcal del Bierzo y el Ponfeblino (César Sánchez / ICAL)



El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, acordó este martes la cesión de uso de las naves e instalaciones del antiguo tren minero entre Ponferrada y Villablino en la capital lacianega para que el Consorcio del Ponfeblino gestione la llegada de dos empresas interesadas en desarrollar dos proyectos industriales de reparación de material ferroviario y de investigación en el campo de la combustión limpia, según explicó la presidenta del Consorcio, Alicia García.

En los próximos días, el organismo deberá cursar la solicitud formal para que la Junta complete un expediente que se cerrará “en pocas semanas”, avanzó el consejero. Tras estos trámites, el Consorcio buscará una fórmula jurídica para que las empresas interesadas, con las que se mantiene un contacto constante, puedan instalarse.

En el primer caso, se trata de la compañía ARMF, que estaría interesada en aprovechar los antiguos talleres para llevar a cabo las reparaciones del material ya cedido al Consorcio, con el objetivo de “poner en marcha en algún momento el proyecto turístico” de recuperación de la infraestructura, explicó García.

Al respecto, Suárez-Quiñones recordó que la Junta ya cedió en febrero de este año parte de los vehículos utilizados en la antigua línea férrea, en concreto, cuatro locomotoras, dos vagones abiertos y 20 vagones cerrados. El otro proyecto empresarial corre de la mano de la empresa Enagas, que estaría interesada en aprovechar esas locomotoras para investigar el uso de combustiones limpias.

Con el objetivo de “iniciar cuanto antes el proyecto industrial”, las naves de Villablino pondrán la primera piedra de la “explotación turística y económica” de la antigua línea. Al respecto, el consejero recalcó el “compromiso total” de la Junta con el territorio y destacó que el Ejecutivo autonómico ayudará al proyecto “dentro de sus posibilidades” en el marco del Plan de Dinamización de los Municipios Mineros.

En ese sentido, subrayó que la cesión se supedita a un uso de interés general, en este caso, el desarrollo económico y social del territorio, y avanzó que esta “buena noticia para el Bierzo y Laciana” es el “primer paso” de cara a una futura cesión del uso, o incluso de la propiedad, de la totalidad de la línea.

Al respecto, recordó que, una vez cedidas las instalaciones de Villablino, la Junta trabaja para aclarar la “situación jurídica indefinida” de los tramos que van de Cubillos del Sil a la capital lacianega y de Ponferrada a Cubillos. Se trata de un trabajo iniciado en la pasada legislatura que consiste en identificar a los más de 500 propietarios de los espacios por los que transcurre la línea para solucionar la situación e inscribir un título en el Registro de la Propiedad a beneficio del Gobierno autonómico. “Seguimos caminando para que los otros dos tramos lleguen al mismo estado”, adelantó Suárez-Quiñones.