Las subidas salariales en los convenios de Castilla y León acumulan seis años por debajo de los niveles en España

CCOO y UGT cargan contra una patronal “cicatera” y exigen subidas del 3% para 2019, cuando deberán negociar 80 convenios para 124.223 trabajadores

19 de Enero de 2019
Actualizado: 20 de Enero de 2019 a las 18:37
Guardar

La negociación colectiva para elevar los salarios de los trabajadores y repartir la riqueza en un contexto de crecimiento y tras los sacrificios de los años de crisis será el caballo de batalla de los sindicatos UGT y CCOO en Castilla y León en sus relaciones bilaterales con la patronal este año. El Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), suscrito con CEOE, se trasladó a la Comunidad el pasado 31 de julio y si no se está cumpliendo en España, menos en Castilla y León.

El objetivo de aproximar los sueldos a la media española se aleja cada año más, ya que los convenios de la Comunidad llevan seis años con cuantías pactadas por debajo de la media y ya acumulan un uno por ciento de desventaja en la negociación durante el periodo. Aunque los datos han mejorado los últimos ejercicios con la recuperación económica, si se tiene en cuenta todo el periodo la subida media de los seis años fue del 0,85 por ciento anual en la Comunidad, frente al 1,02 por ciento de España.

Hay que remontarse a 2012 para encontrar cifras superiores en la negociación salarial en Castilla y León, cuando los sueldos medios se elevaron un 1,53 por ciento, frente al 1,31 por ciento de la media. Al año siguiente, comenzó el periodo de pérdida, cuando subieron un 0,45 por ciento en la Comunidad, frente al 0,57 nacional; y en 2014 sólo se pactó un 0,33 por ciento de alza, mientras que el porcentaje en España se mantuvo en niveles del año anterior. Asimismo, en 2015, se acordó en Castilla y León una subida media del 0,52 por ciento y en 2016 del 0,85 por ciento, frente al 0,74 y 1,06 por ciento nacional. Por último, en 2017 se logró un 1,35 por ciento y en 2018 un 1,62 por ciento, frente a acuerdos medios en España del 1,43 y 1,75 por ciento. Todos porcentajes muy alejados de los pactados con CEOE.

La situación de crecimientos pactados inferiores se repitió durante los últimos seis ejercicios tanto para los convenios de empresa como para los sectoriales. La subida media de los primeros se situó entre 2013 y 2018 en la Comunidad en el 0,65 por ciento, frente al 0,75 por ciento de España; mientras que los sectoriales subieron una media anual del 0,88 por ciento en Castilla y León, frente al 1,03 por ciento para el conjunto de las autonomías.

Por provincias, la subida media anual en 2013 y 2018, fue inferior a la media en España (1,02 por ciento) en todas las provincias excepto en Ávila y en Segovia, con un 1,03 por ciento en ambos casos, e igualó la media española Salamanca.

Por el contrario, León registró el peor dato de subida salarial media en convenio durante el periodo, con un 0,3 por ciento, sobre todo por el impacto de la cifra en 2014, cuando las retribuciones bajaron un 3,3 por ciento, frente a un alza en España del 0,57. Asimismo, la subida media se situó en el 0,75 por ciento en Zamora; en el 0,79 por ciento en Burgos; en el 0,85 por ciento en Valladolid; en el 0,99 por ciento en Palencia; y en el uno por ciento en Soria. Los convenios autonómicos crecieron una media del 0,66 por ciento.

La movilización está servida en una año en el que sólo en la Comunidad hay que negociar 80 convenios para 124.223 trabajadores, 35 que se arrastran del 2018 para 57.501 y otros 45 que finalizaron el año pasado, con 66.722 afectados. El objetivo es una subida que ronde el tres por ciento y que todas las categorías cobren al menos 14.000 euros anuales, con el reto de alcanzar acuerdos que superen la media nacional para que los trabajadores de Castilla y León se aproximen al salario medio en España, ya que los sueldos en la Comunidad se situaron en los 20.381,7 euros brutos en 2017, frente a los 22.806,95 en el conjunto autonómico, según el INE.

Otro mal año

Los salarios pactados tendrían que haberse situado el año pasado por encima del dos por ciento y aproximarse al tres por ciento para dar cumplimiento al AENC y en Castilla y León deberían haber subido más para recortar la diferencia con la media de España. Sin embargo, un análisis de los datos de subida salarial pactada en la negociación colectiva, que facilita el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, constata que el año se acordaron alzar del 1,62 por ciento en la Comunidad, frente al 1,75 por ciento en España. Los convenios de empresa elevaron sus salarios en la Comunidad un 1,38 por ciento, en la media nacional, pero los sectoriales, se situaron en el 1,63 por ciento, cuando en España se incrementaron un 1,77 por ciento.

Por provincias, el año pasado sólo Ávila y Palencia registraron subidas medias pactadas por encima de la media, sobre todo la provincia abulense con un 2,61 por ciento, una “situación anómala”, explicaron desde los sindicatos, que responde a acuerdos acumulados de ejercicios anteriores sin subidas. Asimismo, en la provincia palentina se pactaron subidas del 1,76 por ciento, similar a la nacional. El resto de provincia estuvieron por debajo, León, 1,44 por ciento; Salamanca, 1,45 por ciento; Burgos, 1,48 por ciento; Zamora, 1,56 por ciento; Segovia y Valladolid, 1,68 por ciento, en ambos casos; y Soria, 1,73 por ciento. Los convenios autonómicos se situaron en el 1,21 por ciento.

Críticas sindicales

Los secretarios de Acción Sindical y Negociación Colectiva de CCOO y de Política Sindical, Industrial y Empleo de UGT, Fernando Fraile y Raúl Santa Eufemia, respectivamente, cargaron contra una patronal “cicatera” que “no tiene respeto por los trabajadores” y exigieron que se cumplan los acuerdos suscritos.

Fraile recordó que existe convocado un proceso de movilizaciones a nivel confederal y expuso que van a exigir a la patronal de la Comunidad, el cumplimiento del AENC, con subidas en torno al tres por ciento “y sino se cumple movilizaremos la negociación de los convenios colectivos”. “La movilización estatal se trasladará a todos los sitios”, advirtió.

Santa Eufemia exigió a Cecale que cumpla con el AENC y recordó que si los sindicatos están realizando una labor didáctica hacia sus delegados sobre lo suscrito, la patronal autonómica “no mueve ni un solo dedo para cultivar a sus territoriales para que lo cumplan”. En este sentido, destacó que esperarán al desarrollo de las movilizaciones en Madrid, para ver si se puede hacer algo contra la situación a nivel autonómico.

Fernando Fraile denunció que no son capaces de recuperar poder adquisitivo porque se están encontrando con una patronal “muy cicatera, que sigue basando la competitividad en salarios y debe abandonar esa política”. Asimismo, lamentó que las relaciones laborales siguen en un claro desequilibrio desde la reforma laboral de 2012 y deseó que se materialicen cuando antes los acuerdos alcanzados con el Gobierno para su derogación.

Por último, denunció que Cecale no tiene capacidad para negociar los convenios, la tienen sus provincias, pero recordó que cuando se traspuso el AENC a la Comunidad, firmó el presidente de la comisión de relaciones laborales, un órgano compuesto por todas las organizaciones patronales territoriales. “Entendemos que el acuerdo lo firmaron todos y exigiremos que lo cumplen”, sentenció.

Raúl Santa Eufemia constató que 2018, fue una de los mejores en datos de convenios firmados, pero no en peso de los acuerdos, que carecieron de valor salarial, de recuperación de derechos por la falta de flexibilidad para introducir articulados nuevos. “Los empresarios no entran más que en el debate rápido de calendario y salario”, dijo, para criticar que las subidas pactadas están “muy alejadas” de la recuperación y de equipara retribuciones a los beneficios que “están teniendo todos los sectores”.

El responsable urgetista denunció las enormes dificultades que tienen los delegados sindicales para lograr mejores avances, ante una patronal a la que no se puede obligar, y situaciones laborales que vienen de despidos o congelaciones durante años. En este sentido, denunció que “no existe cultura patronal para equiparar los salarios cuando se está creando empleo” y sentenció que “la patronal no tiene respeto a los trabajadores”.