La levantadora berciana Lydia Valentín, que ya fue campeona de Europa en marzo, se proclamó este jueves campeona del mundo en Ashgabat (Turkmenistán), aunque esta vez lo hizo en la categoría de -81 kg. La de Camponaraya, que fue la mejor en arrancada con un total de 113 kilos, fue medalla de bronce en dos tiempos con 136 para acabar imponiéndose con 249 en total olímpico. Así superó a la bielorrusa Darya Naumava, que se colgó la plata con 245, y a la ecuatoriana Tamara Salazar, que ocupó el último cajón del podio después de acumular 242 en total.
Fue gracias a su aplastante dominio en arrancada por lo que Valentín acabó repitiendo título mundial tras el conseguido el pasado año, eso sí, en la categoría de -75 kg. De hecho, la haltera berciana, que cumplió en febrero los 33 años, se impuso en esta disciplina al levantar 113 kilos, con los que superó a Naumava, que elevó 108, y la estadounidense Jenny Arthur, que pudo con 106.
En dos tiempos la berciana se tuvo que conformar con la medalla de bronce al poder ‘sólo’ con 136 kilos. Fue superada por Naumava y Salazar, ambas con 137 kilos, mientras que Arthur apenas elevó 135. Aun así, la levantadora berciana acabó como la mejor al final de prueba y se despidió del Mundial con las dos presea doradas en total olímpico y arrancada y la medalla de bronce en dos tiempos.