'Descorche oficial' a la XXVI edición de la Feria del Vino de la villa del Cúa que tendrá lugar los días 21, 22 y 23 de abril con la participación de 17 bodegas. Además de la tradicional degustación de vinos en la plaza Mayor, el Consejo Regulador busca este año “involucrar a viticultores y bodegas”, mediante jornadas, charlas y coloquios centrados en el sector. Este viernes ha tenido lugar la inauguración de la feria que ha contado con la actuación de los Zumbapailleros y ha entregado los diplomas a los vinos ganadores de la Cata Concurso "El Maestro".
Las bodegas inscritas podrán presentar sus muestras al concurso de mejores vinos de cada variedad. Una cata a ciegas servirá para elegir el mejor caldo blanco, tinto, rosado y envejecido, explicó Pérez. En la plaza, los precios será de 1,5 euros para los vinos jóvenes, de dos euros para los vinos de barrica y de la variedad Godello y de 2,5 euros para los caldos de crianza. También se podrán adquirir las tradicionales copas conmemorativas al precio de 2,5 euros.
Además, la feria contará con las actuaciones musicales de la banda de rock local Hijos de la Ley Corcuera, del grupo folklórico Zumbapalleiros y de la Gastrotuna. Las actividades se completan con una jornada sobre el papel de la mujer en el desarrollo de la economía circular, organizada de manera conjunta con el municipio italiano de Tuorano Nuovo, con el que la villa del Cúa mantiene un hermanamiento desde hace varios años.
Zonificación
Tanto la alcaldesa de Cacabelos, Irene González, y el presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen (DO) Bierzo, Adelino Pérez, hicieron referencia al importante peso de la industria vitivinícola en el municipio de Cacabelos y al destacado papel del sector en “la zona con mayor extensión de viñedo antiguo en el mundo”. La regidora puso en valor el proceso de zonificación impulsado por la DO como una herramienta para posicionar a los vinos del Bierzo como “referencia mundial”.
En ese sentido, el presidente de la DO, recordó que la región vinícola berciana es la primera de España en conseguir esta clasificación que distingue entre vinos de villa, de paraje y de viña, como ocurre en la región francesa de Borgoña. “Nos está poniendo en el mapa de otros países”, apuntó Pérez, que señaló que Estados Unidos y a los países del norte de Europa, junto a los mercados emergentes del continente asiático, son los principales destinos interesados en este nuevo sistema.
Enoturismo y energías renovables
En la misma línea, alcaldesa y presidente de la DO reclamaron “sentido común” a las administraciones superiores para evitar que la proliferación de instalaciones de producción de energías renovables en los territorios tradicionalmente ligados a la actividad vinícola perjudiquen a un sector clave para la vertebración del territorio y afecten a la vertiente enoturística del mismo, al dañar los paisajes en los que se asienta.
Al respecto, Pérez reiteró que el Consejo Regulador mantendrá la lucha contra los proyectos previstos en la zona. “No podemos consentir que nos pongan parques eólicos y solares y nos obliguen a arrancar viñedo y a estropear el paisaje”, recalcó el presidente, que instó a profesionalizar el sector vinculado al turismo enológico para aprovechar esta “otra fuente de ingresos”.
