La obra que nadie se atrevía a hacer en Ponferrada y Alfredo Carballo 'armó': el esqueleto del puente García Ojeda

A finales de los 60 había una obra de la que se hablaba en Ponferrada, una obra casi faraónica para la época, el puente que ahora se conoce como García Ojeda. La falta de grúas para manejar las enormes piezas que se necesitarían para tal infraestructura eran el principal problema para encontrar una empresa que se hiciese cargo del trabajo, sin embargo, como todas las grandes historias, un establecimiento de la época la peluquería 'Derby', fue testigo del trato hablado para construir este gran emblema de la capital berciana.

Entre las paredes de la ya extinta peluquería 'Derby', Alfredo Carballo Valtuille, dueño de la empresa Ceinca, se aventuraba en un proyecto "que nadie se atrevía a hacer", explica a InfoBierzo. Su empresa hacía ventanas, estructuras de hierro, naves... nada parecido a la gran infraestructura que terminaría haciendo y que a día de hoy perdura en el corazón de la ciudad. Así, en una de las antiguas casas adosadas del Castillo de los Templarios, vio por primera vez los planos de lo que sería el puente Nuevo, ahora García Ojeda.

Este hombre, natural de Camponaraya, se encargó de la estructura metálica, el esqueleto del puente, que después fue recubierto de hormigón para mostrar el aspecto que ahora conocemos. "Cada pieza era de unos 5.000 kilos y había que colgarlas y transportarlas de una esquina a la otra del río", asegura Carballo, que a sus 83 años recuerda casi todos los detalles de esta importante obra para la ciudad y para su carrera.

Y es que no era tarea fácil la de colgar, transportar y ensamblar las enormes piezas. Carballo tuvo incluso que reeditar la tradicional pluma de montar naves, para adaptarla a esta infraestructura, de manera que les permitiese desplazar los arcos, y posteriormente los trabajadores soldar ambas mitades subidos en ellos.

"En mitad del río había un galpón, como lo llaman los gallegos, un muro con una tela metálica desde donde andaba el esquí de la pluma", y es que Carballo recuerda lo ardua que era cada pequeño movimiento en esta obra.

La colocación de la estructura metálica comenzó en primavera y tardaron unos 5/7 meses en terminarla, sin embargo, todavía quedaba trabajo por hacer hasta que el puente estuviese completo.

Alfredo recuerda con humor cómo "paisanos" que entonces tenían la edad que él ahora, les aseguraban mientras trabajaban en las mitades de los arcos que "no cerrarían". "Se ponían a dirigir desde abajo y nos miraban mientras trabajábamos", aseguraba el berciano.

Este fue el único puente en el que trabajó Alfredo Carballo, que bromea sobre cómo su trabajo ya no se ve "después se cubrió con hormigón y no se vio nada más". "No quedan ni las barandillas que hizo mi socio, y que tuvieron que quitar porque eran muy bajas".

Alfredo y su familia han cedido ahora, décadas después de la construcción, algunas imágenes y vídeos inéditos que su familia guardaba con gran cariño y que ahora son parte de la historia de la ciudad.

El puente es una construcción de hormigón de finales de los 60 y principios de los 70 del siglo XX. La estructura lleva el nombre del último alcalde predemocrático de Ponferrada, Luis García Ojeda, que fue el impulsor de esta importante infraestructura. Durante un tiempo se le llamó puente Nuevo, hasta que por iniciativa del también alcalde Celso López Gavela se aprobó el cambio del nombre del puente, dedicándoselo García Ojeda.

Tiene una longitud aproximada de 180 metros y dispone de dos vanos en arcos parabólicos con luces de 55 y 23 metros. Los vanos se componen de seis arcos semejantes paralelos arriostrados por secciones con vigas transversales. Toda la obra está realizada en hormigón armado. El tablero es muy amplio, con una anchura aproximada de 20 metros, lo que permite una calzada de doble sentido, amplias aceras y carriles de aparcamiento de vehículos.

A finales de febrero, unas fotografías inéditas publicadas por Luis Alberto Mondelo en el grupo de Facebook 'Fotos Antiguas de Ponferrada', cedidas por la familia de Félix Castro, muestran la construcción de uno de los puentes más famosos de la capital berciana: el García Ojeda.

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Además, en el año 2022, también salieron unas imágenes de la prueba técnica para corrobar la capacidad de aguante del puente. Tomada la captura en 1971 desde las inmediaciones del Castillo de Ponferrada, se puede observar un conjunto agrupado de vehículos pesados en la mitad inferior del Puente García Ojeda, los cuales se encargan de comprobar la resistencia de este nexo entre las diferentes zonas de Ponferrada, un espacio vial que sigue 'vivo' en la actualidad.

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