El pleno de este viernes del Ayuntamiento de Ponferrada ha aprobado con los votos a favor de PP, CB y Vox y la abstención del PSOE los 2,3 millones de euros de remanentes que se destinaran en obras de mejora de asfaltado, de instalaciones deportivas, de educación y administración general.
Así, las obras y sus inversiones, son las siguientes:
- Reparaciones de infraestructuras: 159.496 euros
- Escaleras en el colegio de Navaliegos: 48.300 euros
- Plan de asfaltado y renovación de aceras: 1.205.576 euros
- Vehículos para las brigadas: 40.000 euros
- La cubierta del colegio de Flores del Sil: 200.000 euros
- Caldera para el colegio de San Antonio: 60.000 euros
- Pintura para la fachada del Estadio municipal El Toralín: 20.700 euros
- Césped artificial del campo de futbol de Flores del Sil: 300.000 euros
- Jaula de lanzamiento en el estadio Colomán Trabado: 48.000 euros
- Reorganización Zona 1 del Edificio del Ayuntamiento: 30.780 euros
Aunque las actuaciones ya eran conocidas, puesto que PP y CB ya las habían presentado con anterioridad, lo que ha protagonizado la casi primera hora del debate han sido las duras acusaciones e intercambio de pareceres entre, principalmente, Iván Alonso (CB), Olegario Ramón (PSOE), Luis Antonio Moreno y Marco Morala (PP). De hecho, el actual alcalde ha llamado hasta en dos veces al orden a Ramón.
El primero de los 'asaltos' no ha tardado más que unos minutos en llegar tras el comienzo del pleno. La concejala de VOX, Patricia González, indicaba que su partido votaría a favor de los remanentes, puesto que están "siempre del lado de los ponferradinos". Sin embargo, tras su intervención ha seguido con las declaraciones correspondientes al siguiente punto del orden del día, que todavía no se había leído. Ha sido entonces cuando el portavoz del PSOE ha verbalizado algo inaudible para los micrófonos de la sala, a lo que rápidamente Morala ha respondido con seriedad, pidiéndole silencio y recordándole "ahora el alcalde soy yo, no me interrumpa". González, por su parte, añadía "no me he liado, señor Ramón".
Por su parte, el antiguo socio de gobierno de Ramón, Alonso comenzó su primera intervención recordando la voladura de las torres de Compostilla y refiriéndose a la jornada del jueves como "un día triste para El Bierzo". Acto seguido, felicitó al presidente del Consejo Comarcal por la supuesta hazaña: "las voladuras salieron muy bien".
PP y CB hablaron sobre la necesidad de las obras presentadas en los remanentes. "Este punto del orden del día es importantísimo, son obras fundamentales y urgentes en el municipio y para atender el día a día del ayuntamiento", decía Luis Antonio Moreno, que celebraba estar dando respuesta a "reivindicaciones históricas" como el "abandono de calles y aceras".
El PSOE afeó al nuevo equipo de Gobierno la "falta de participación ciudadana" a la hora de conformar las propuestas para los remanentes y lamentaron que ninguna de las 4 obras que su grupo municipal propuso, se estimase.
El grupo socialista también denunció un "blanqueamiento" del Ayuntamiento hacia la Junta, pues consideran que las obras de la cubierta del colegio de Flores aunque "necesarias, son competencia de la administración autonómica".
Llega entonces, otro de los encontronazos, entre Ramón y Alonso. El exalcalde afea la falta de "capacidad de interlocución" con la Junta y bromea con el café que mantuvieron PP, CB y VOX en las Cortes. "Si éramos tan malos -le dice a Alonso- no sé por qué no se fue. Igual es porque había 28.000 razones y ahora hay 44.000 para quedarse", haciendo referencia a su sueldo en el anterior mandato y al actual.
El portavoz de Coalición respondió con contundencia a las declaraciones de Ramón, y le acusó directamente de "quitarle el puesto a un compañero que había dicho abiertamente que quería un tercer mandato -Gerardo Álvarez Courel en el Consejo del Bierzo-" y de "no dejar a otro compañero en su puesto de portavoz en el Ayuntamiento, ya que bastantes 'razones' tiene ya de la otra institución". Además, quiso recordarse su "capacidad de dilatar las cosas, engañar, dar largas, y ser desleales con su socio de gobierno; por eso ahora está en la oposición".

Finalmente, durante el turno de palabra del portavoz 'popular', Ramón contestó a una pregunta retórica Moreno, algo que Morala consideró como una interrupción y por lo que llamó por primera vez al orden al exalcalde. Justo antes de votar, Ramón quiso intervenir para "mostrar su sentido del voto", y su turno de palabra fue rechazado por Morala, que una vez más llamó al orden a Ramón por interrumpirle al hablar.
Así, el punto salió adelante con los votos de PP, CB y VOX y la abstención del PSOE, que aseguró que votaría a favor si incorporaban las propuestas de ejecutar obras en las piscinas climatizadas y muro en Bouzas; además de que para que "no corra riesgo plan urgente de arbolado, se incluya el elevador de un bajo del Toralón con cargo a remanentes y no al plan citado, disminuyendo la partida de la caldera, de 60.000 a 20.000 euros." Moreno le espetó que "esto no es mercadillo, no es Marrakech, para regatear con prouestas".