La elaboración y publicación de este informe se enmarca en el apoyo de Unicaja Banco al sector agrario y la industria agroalimentaria, pilares estratégicos de la estructura económica nacional, tanto por su contribución a la generación de riqueza y empleo como por el papel que desempeñan en la cohesión y el equilibrio territorial
Unicaja Banco ha publicado su informe ‘El Sector Agrario y la Industria Alimentaria en España: Principales rasgos y análisis regional en 2022’, continuando la serie de ediciones iniciada hace más de dos décadas en torno al sector, pero ampliando, por segundo año consecutivo, el ámbito de estudio al conjunto nacional y sus distintas comunidades autónomas. Este documento ha sido realizado por Analistas Económicos de Andalucía, sociedad de estudios del Grupo Unicaja Banco.
El objetivo principal de este informe es ofrecer un análisis de la situación y evolución reciente del sector agrario y de la industria alimentaria en España, incluyendo un análisis más detallado por comunidades autónomas, cuando la información así lo permite, con los últimos datos disponibles.
El informe se divide en cuatro capítulos. El primero se centra en analizar la relevancia del sector agrario, mostrando, entre otros aspectos, el desarrollo de la Política Agrícola Común (PAC), el comportamiento de los principales indicadores del mercado de trabajo y la evolución de las producciones agrarias.
En el segundo capítulo se presentan las principales macromagnitudes agrarias en 2022, último ejercicio del que se dispone de información completa, analizando los aspectos más destacados de la evolución de la renta y la producción agrarias en España y sus comunidades autónomas.
Por su parte, el tercer capítulo está centrado en el análisis de la industria agroalimentaria, tratando de poner de relieve la importancia de esta rama industrial, a través de sus principales magnitudes (volumen de facturación, empleo y estructura empresarial), sin olvidar las exportaciones agroalimentarias y el consumo alimentario.
Finalmente, el informe incluye un capítulo que recoge los principales resultados y conclusiones, relativos a la renta y la producción agrarias en 2022, así como los aspectos más destacados relacionados con la industria agroalimentaria.
Principales rasgos del sector agrario y la industria agroalimentaria en Castilla y León
Castilla y León genera alrededor del 9% del Valor Añadido Bruto (VAB) del sector agrario en España. Asimismo, en esta región el sector agrario tiene un peso en su estructura productiva en torno al 5,5% del VAB regional (alrededor del 3% en España).
En el promedio de 2022, la Comunidad ha sido la tercera española con mayor número de ocupados en el sector agrario en España, con alrededor de 66.600 personas, lo que supone el 8,6% del total nacional y el 6,6% del empleo total regional. Con relación a 2021, el empleo ha aumentado en torno al 1% (-3,5% en España).
Castilla y León es la segunda Comunidad por superficie de cultivo, con más de 3,5 millones de hectáreas que suponen el 21,0% del total nacional. Destaca la superficie dedicada a cereales, que supone más de la mitad del total de hectáreas de cultivo y algo más de un tercio de la superficie cerealista en España. La región también concentra cerca del 40% de la superficie de cultivos industriales en España y el 30% de la de plantas forrajeras.
Particularizando a las producciones, la región es la principal productora de cereales, concentrando alrededor del 43% de la producción nacional de trigo y más del 30% de la de cebada o maíz. También destaca la producción de plantas industriales y patatas, con más del 40% de la producción española de girasol o más de un tercio de la de patata.
Respecto a la ganadería, cabe reseñar que Castilla y León es la primera Comunidad por número de cabezas de bovino, con el 22,5% del total nacional, y la tercera por número de efectivos de ganado ovino y porcino. En cuanto a los principales productos de origen animal, la región es la segunda productora de leche tras Galicia, siendo también importante la producción de huevos.
Los últimos datos publicados por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación señalan que la renta agraria de Castilla y León representa algo más del 10% de la renta total española, aportando la producción animal más del 45% del valor de la producción agraria, un porcentaje superior a lo que supone en el conjunto nacional.
En lo que respecta a la producción agraria (vegetal y animal), la región representa en torno al 12,5% del valor de la producción española. En concreto, la producción agrícola supone alrededor del 10,5% del valor de la producción en España, representando, asimismo, casi el 50% de la producción agraria regional.
Castilla y León cuenta con una elevada especialización en cereales, que suponen más de la mitad del valor de la producción agrícola regional, seguidos de plantas forrajeras (algo más del 14%) y hortalizas (en torno al 10,5%). Asimismo, la región representa alrededor de un tercio del valor de la producción de cereales y plantas industriales en España, así como en torno a una cuarta parte de la valoración de plantas forrajeras y patata.
Por su parte, la región representa alrededor del 15% del valor de la producción animal en España. En este caso destaca la carne y ganado porcino, que supone en torno al 41% del valor de la producción ganadera regional, seguido de la leche (cerca del 20%) y la carne de bovino (alrededor del 17%). También habría que destacar que la región concentra alrededor de una quinta parte del valor de producción de bovino y huevos en España.
La industria de alimentación y bebidas es la principal actividad industrial en España. En el caso de Castilla y León, la agroindustria representa en torno a un tercio de la cifra de negocios y el empleo en la industria manufacturera, siendo la tercera Comunidad Autónoma por volumen de facturación y empleo (alrededor de un 9% del total nacional). Destaca la industria cárnica, con alrededor de un 28% de la facturación del sector agroalimentario de la región, así como los productos de alimentación animal y los productos lácteos.
En lo que respecta a la demografía empresarial, a 1 de enero de 2022, existían 3.026 empresas de alimentación y bebidas en Castilla y León, lo que supone en torno al 10% de las empresas del sector en España y alrededor del 32% del total de empresas manufactureras de la región. Por ramas, alrededor del 34% de las empresas agroalimentarias se dedican a la fabricación de productos de panadería y pastas alimenticias, seguida del procesado y conservación de carne (25,4%) y la fabricación de bebidas (22,4%). Por su parte, destaca el peso de la región en las empresas dedicadas al procesado y la conservación de carne (22,1% del total nacional).
El valor de las exportaciones agroalimentarias en Castilla y León ascendió en 2022 a 2.885,5 millones de euros, el 19,5% del total de exportaciones en la región y el 4,5% del total nacional. Esta cuantía supone un incremento del 13,1% respecto a 2021 (12,8% en España). Por su parte, el superávit de la balanza comercial agroalimentaria en la región superó en 2022 los 1.300 millones de euros.
Alrededor del 28% del valor de las exportaciones agroalimentarias de la región corresponde a productos cárnicos. Por otro lado, el principal destino de las exportaciones agroalimentarias de esta región en 2022 fue Portugal.
Finalmente, en lo que concierne al consumo alimentario, el gasto per cápita en España en 2022 ha sido de 1.597,6 euros, una cantidad un 0,8% inferior a la del ejercicio anterior. En el caso de Castilla y León, el gasto medio en alimentación es mayor, en torno a los 1.645 euros por persona, un gasto que también ha disminuido respecto a 2021.
Sector agrario e industria agroalimentaria en España
España es el cuarto país de la UE por valor generado en el sector agrario, tras Francia, Alemania e Italia, y el cuarto por cifra de negocios en la industria de alimentación y bebidas.
El VAB del sector agrario en España (31.961 millones de euros) ha disminuido un 1,1% en 2022 con respecto al año anterior, afectado por las negativas condiciones climatológicas y el incremento en los costes de producción. Este descenso ha sido especialmente intenso en algunas de las comunidades con un mayor peso del sector agrario en su estructura productiva o con mayor aportación al VAB nacional, como Andalucía, Castilla y León, Cataluña o Extremadura. Por su parte, en el promedio de 2022, el empleo en el sector descendió un 3,5%, hasta los 774.800 ocupados, en torno al 4% de la población ocupada en España.
Según estimaciones provisionales del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, la renta agraria en España se estima en 27.663,6 millones de euros en 2022, casi el 14% de la renta comunitaria (el tercer país de la Unión tras Francia e Italia).
La renta agraria ha disminuido un 6,2% en España con relación a 2021 (15,9% en la UE). El crecimiento en el valor de la producción agraria (vegetal, animal, producción de servicios y actividades secundarias no agrarias no separables de la agricultura) no ha podido contrarrestar el fuerte incremento en los consumos intermedios, derivado únicamente del crecimiento de los precios, superior al 35% en los casos de la energía y piensos y cercano al 75% en fertilizantes.
En 2022, el valor de la producción agraria (vegetal y animal) en España se situó en 63.171,9 millones de euros, según estimaciones del Ministerio, casi un 11% más que el año anterior (19,2% en la UE). Este crecimiento se ha debido únicamente al aumento de los precios (21,3%), ya que las producciones han experimentado un descenso del 8,8%, muy condicionadas por las negativas condiciones climatológicas.
España es el tercer país de la UE por valor de la producción tanto vegetal como animal, con algo más del 12% de la producción comunitaria. En concreto, es el primer país de la Unión Europea por valor de producción de frutas, aceite de oliva, ganado porcino y ganado ovino-caprino. Asimismo, es el segundo por valor de producción de las hortalizas y el tercero en vino y carne y ganado bovino.
El valor de la producción vegetal en España alcanzó los 36.276,1 millones de euros en 2022, lo que representa el 57,4% del valor de la producción de la rama agraria en España. Esto supone un crecimiento del 3,6% con relación a 2021 (15,3% en la UE), que se ha debido exclusivamente al incremento en los precios (19,9%), ya que las producciones han disminuido (-13,6%).
Más de la mitad del valor de la producción vegetal en España corresponde a productos hortofrutícolas, siendo también relevantes los cereales (17,1%) y el aceite de oliva (9,9%). La producción española representa más de una cuarta parte del valor de la producción de frutales en la UE, más de la mitad de la de aceite y en torno al 17% del valor de producción de las hortalizas.
Por grupos de cultivos, el valor de la producción se ha incrementado de forma generalizada en 2022, con la excepción de las frutas (-12,0%), por la caída en las producciones. En el resto, las tasas de crecimiento han oscilado entre el 1,1% de los cereales y el 36,2% del aceite de oliva, obedeciendo este último incremento, en gran medida, al repunte de los precios. Por su parte, el valor de la producción de hortalizas (30,9% de la producción vegetal en España) ha aumentado un 5,4%, debido únicamente al aumento de los precios, al igual que ha ocurrido en el caso de los cereales.
El valor de la producción animal en España alcanzó los 25.089,9 millones de euros en 2022, lo que representa en torno al 40% del valor de la producción de la rama agraria en España. Destaca la aportación española a la producción comunitaria en los casos del ganado porcino y ovino-caprino (superior al 20%). Con relación a 2021, se estima un crecimiento del 22,5% (26,7% en la UE), que se ha debido al aumento en los precios (24,3%), ya que las producciones han descendido (-1,5%).
En España, la carne y el ganado representan un 75,6% del valor de la producción ganadera española (54,7% en la UE), destacando el ganado porcino, que supone el 40,3% de la valoración de la producción. El 24,4% restante corresponde al valor de los productos animales (leche y huevos), con una mayor contribución de la leche. Tanto el valor de producción de la carne y ganado como el de los productos animales se ha incrementado en 2022, a consecuencia únicamente de la subida de los precios.
La industria de alimentación y bebidas es una de las principales actividades industriales de la UE. En España, cuarto país por cifra de negocios, la industria alimentaria es la principal rama industrial, con más de 140.000 millones de euros, que representan en torno a una cuarta parte de la facturación de la industria manufacturera (el porcentaje más elevado entre los principales países de la UE). Asimismo, la agroindustria cuenta con casi 480.000 ocupados, que suponen más de una quinta parte del empleo en el sector manufacturero.
En lo que respecta a la demografía empresarial, a 1 de enero de 2022, la industria de alimentación y bebidas contaba con un total de 30.159 empresas, lo que supone alrededor del 17,5% del total de empresas de la industria manufacturera. Con relación a 2021, se ha producido un descenso del 0,3% (101 empresas menos), común a casi todas las comunidades autónomas
El valor de las exportaciones del sector agroalimentario español ascendió en 2022 a 64.248,4 millones de euros, lo que representa un crecimiento del 12,8% respecto a 2021, que se habría debido, en gran medida, al incremento de los precios.
Más de un tercio del valor de los productos agroalimentarios exportados corresponde a frutas, hortalizas y legumbres, seguidos de productos cárnicos (17,8%) y grasas y aceites (11,0%), destacando las ventas de pimientos, tomates, cítricos, frutos rojos, carne de cerdo, aceite de oliva o vino. Por destinos, el 64,1% del valor total exportado en 2022 tuvo como destino la UE, siendo Francia, Alemania e Italia los principales destinos de las exportaciones agroalimentarias (36,0% del valor exportado por España). Las exportaciones a los principales mercados crecieron en 2022, salvo en el caso de China.
El consumo total en alimentación y bebidas (dentro y fuera del hogar) en España alcanzó los 30.946,9 millones de kilogramos o litros en 2022, lo que supone un descenso del 7,1% respecto a 2021, en un contexto marcado por la recuperación tras la crisis sanitaria mundial, el conflicto entre Rusia y Ucrania, y el aumento de la inflación. Por el contrario, el gasto creció un 2,7%, alcanzando los 107.780,5 millones de euros, como consecuencia del incremento del consumo realizado fuera de los hogares y del mayor precio medio pagado tanto fuera como dentro del hogar.
En cuanto al gasto, la carne supone el 19,0% del gasto total en alimentación de los hogares, seguida del pescado (12,0%) y la fruta fresca (9,8%). Entre los alimentos que suponen un mayor gasto, destaca el crecimiento en aceite y leche (23,9% y 11,4%, respectivamente, con relación a 2021), debido al fuerte incremento de los precios.