Sacyl modifica el calendario de vacunación e introduce la del meningococo B en los lactantes

La Orden, que se publicará mañana jueves 25 de abril en el Boletín Oficial de Castilla y León, producirá efectos a partir del 1 de junio de 2019

24 de Abril de 2019
Actualizado: 30 de Abril de 2019 a las 18:26
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La Consejería de Sanidad ha modificado el Calendario de Vacunaciones Sistemáticas a lo largo de la vida de las personas para introducir la vacuna del meningococo B. De ese modo, a partir del 1 de junio se introducirá la vacuna frente a la enfermedad meningocócica invasiva por serogrupo B a los tres, cinco y doce meses. Desde la Dirección General de Salud Pública se dictará la instrucción que contemple tanto la distribución de las vacunas por los centros de salud y consultorios como su administración y registro por el personal de enfermería.

La enfermedad meningocócica invasiva es impredecible, tanto epidemiológicamente como clínicamente, y la única forma de controlarla y reducirla es la vacunación sistemática de la población, incluyendo las vacunas en el calendario. Así, en 1988 se introdujo la vacuna frente al Haemophilus influenza; en el año 2000, la vacuna frente al meningococo C; en 2016, la vacuna frente al Neumococo C y más recientemente, en Castilla y León en enero de 2019, la vacuna frente al meningococo ACWY, tanto en lactantes como en adolescentes.

En este momento la situación epidemiológica de la enfermedad meningocócica invasiva se caracteriza por el constante protagonismo del serogrupo B, que es responsable de aproximadamente el 50 por ciento de los casos en España y que alcanza casi las dos terceras partes de los casos recogidos por la red de vigilancia epidemiológica de Castilla y León. Hasta ahora, la vacunación frente al serogrupo B se ha limitado en el Sistema Nacional de Salud a determinados grupos de riesgo. La Junta de Castilla y León quiere extender esta protección al conjunto de la población infantil dado el peso creciente de este serogrupo.

Además, esta vacunación ha sido recomendada por diversas sociedades científicas y, con carácter general, por la mayor parte de los pediatras. Esta recomendación ha tenido como consecuencia la vacunación, de forma privada, de muchos menores; concretamente las coberturas registradas en Castilla y León (51,1 por ciento) son superiores a la media nacional (37,3 por ciento). El coste de la vacunación frente a la meningitis B para las familias está generando una situación de desigualdad y de inequidad, ya que las de menor poder adquisitivo no pueden acceder a ella, lo que genera una menor protección frente a una enfermedad inmunoprevenible en los lactantes de familias con menores recursos.