Si eres un profesional del análisis químico, es muy probable que conozcas sobre los valoradores, también conocidos como titration, y que tengas al menos un dominio básico sobre estos. Pero, entre tener un conocimiento de base sobre lo que es una valoración química y saber cómo escoger la tecnología correcta para aplicarla, hay una brecha considerable. Si eres un profesional del análisis químico, es muy probable que conozcas sobre los valoradores, también conocidos como titration, y que tengas al menos un dominio básico sobre estos. Pero, entre tener un conocimiento de base sobre lo que es una valoración química y saber cómo escoger la tecnología correcta para aplicarla, hay una brecha considerable.
Por eso, hoy repasaremos el concepto de valoración química y hablaremos un poco a profundidad de los valoradores y las características que debes considerar a la hora de escoger el más adecuado para el tipo de titration que deseamos hacer.
¿Qué es una valoración química?
La valoración química es una técnica que se aplica para analizar cuantitativamente sustancias que contienen un químico específico pero con una proporción desconocida. Para ello, se utilizan reactivos sobre soluciones con una concentración conocida. No obstante, esta técnica puede ser aplicada de forma manual o automatizada, permitiendo estudiar distintos compuestos y soluciones y obteniendo resultados que, con los equipos adecuados, suelen ser muy confiables.
¿Cómo hacer valoraciones de forma correcta?
En primer lugar, debemos contar con un laboratorio con valoradores. Para ello, es importante hacer un estudio de costos y beneficios que nos permitan escoger los equipos más adecuados. Ya con un conocimiento del mercado, es de menester entender que no solo debemos optar por valoradores modernos y económicos, sino que debemos seleccionar proveedores certificados, ya que son los que nos garantizarán resultados de calidad.
Utilizar un valorador moderno nos permite automatizar el proceso. Es decir, estos equipos nos ayudarán a disminuir considerablemente el riesgo del error humano del análisis, reforzando y potenciando la fiabilidad de los resultados obtenidos.
Además, al tratarse de un proceso automatizado, una valoración química hecha a través de equipos demora mucho menos y es más fácil de aplicar. De esta forma, el laboratorio ahorra tiempo y costos, permitiéndonos como operadores a realizar la mayor cantidad posible de análisis sin comprometer la calidad de estos.
De hecho, en la mayoría de los casos, estas son las razones por las que no solo es común sino obligatorio hacer uso de equipos modernos para realizar análisis de valoración química.
¿Qué características debe tener un buen equipo valorador?
Ahora que conocemos las ventajas que nos ofrecen los equipos modernos para realizar valoraciones químicas, vale preguntarnos: ¿Qué características nos interesa encontrar en ellos? La respuesta a esta pregunta, nos permitirá escoger el valorador correcto que nos ahorrará tiempo, dinero y trabajo.
Pero, hay que tener en cuenta que cada aplicación es diferente y, en algunos casos, puede ser muy específica. Por ello, escoger un valorador que tenga un amplio rango de acción no es tarea fácil. Aún así, es más sencillo fijar parámetros que son deseables en la mayoría de los valoradores. Algunos de estos criterios, son:
- Versatilidad: Un equipo con el que se puedan realizar distintos realizar distintos tipos de valoraciones automáticas y ser el apoyo perfecto al realizar valoraciones manuales, brindan adaptación, en límites razonables, a las necesidades requeridas por el estudio, sin necesidad de adquirir nuevos equipos.
- Seguridad: Los valoradores no deben comprometer la integridad de quien lo opera ni de los resultados obtenidos en el estudio.
- Precisión: Debe permitir la suficiente cantidad de procedimientos para que el resultado de la valoración sea el deseado.
- Estandarización: En el proceso de valoración química, el equipo utilizado debe estar sujeto a normas internacionales que permitan no solo asegurar la calidad de los resultados, sino que den garantía de ser equipos seguros.
Es sencillo comprobar si un valorador es versátil al momento de adquirirlo, pues solo basta con verificar cuáles son los tipos de valoraciones que admite. No obstante, garantizar que el valorador sea seguro, preciso o estable, requiere de probar el equipo para comprobar su funcionamiento.
Afortunadamente, existen normas y estándares internacionales que los fabricantes de valoradores deben cumplir para obtener certificaciones y homologaciones, como sello de confiabilidad. Un buen ejemplo de esto, son las normas de la Organización Internacional de Estandarización (ISO por sus siglas en inglés), específicamente las normas ISO 9001 e ISO 14001. Si el equipo que hemos adquirido tiene ambos sellos, podemos asegurarnos que es un valorador de alta calidad. Veamos un poco qué trata cada norma.
ISO 9001
La ISO 9001 es la norma que rige los estándares de calidad que involucran desde los procedimientos y la organización empresarial, hasta la satisfacción de los clientes. En otras palabras, está centrada en la aplicación de los sistemas de gestión y aseguramiento de la calidad. Por lo tanto, es el sello base que debemos buscar en los equipos de valoración y en sus proveedores.
ISO 14001
Otro sello de calidad y confiabilidad que debemos tener en cuenta, es la certificación bajo la ISO 14001. Esta norma, rige a las empresas productoras y a las organizaciones proveedoras de servicios en cuanto a los protocolos de seguridad y ambiente. Por eso, las compañías que dan cumplimiento a esta norma, suelen ir un paso más allá al mantener un sistema productivo con altos estándares éticos y morales.