Una empresa familiar que ha sabido mantenerse firme no es común, pero Grupo Lucas lo ha conseguido a pesar de las adversidades naturales de la industria y del tipo de empresa.
Ubicada en la pedanía murciana de El Raal, se dedica al sector de las frutas y hortalizas desde 1970, de la mano de su fundador, Manuel Lucas, padre de los actuales dueños y dirigentes. Su forma de trabajar y su fidelidad hacia sus ideales, les han permitido innovar en varias áreas, lo que la colocan como una de las empresas más reconocidas en el país.
Una de estas innovaciones es que todos los miembros de la familia desarrollan su labor profesional en torno al Grupo, en distintos campos, como la producción, la dirección, en lo referente al campo y a la actividad comercial.
Otra de sus características es la incorporación continua de diferentes variedades de semillas y de productos, lo que los mantiene a la vanguardia. Pero la que puede ser la más importante, poco tiene que ver con todo esto, sino más bien con su gente.
Dentro de su proceso de crecimiento y de mantenerse fieles a sus principios, los trabajadores son siempre invitados a que crezcan junto con las nuevas técnicas y procesos productivos, además de que trabajan en estrecha relación con sus proveedores, siempre con el objetivo de reducir el impacto ambiental.
Es así como se han desarrollado proyectos como la operación polinizador, la implantación de bandejas de plástico rPET o el proyecto semilla. Sin embargo, uno de las mayores apuestas que tiene la empresa es el compostaje.
Son miles de toneladas de residuos diarios los que se desperdician, incluyendo una gran cantidad de ellos de material orgánico. Se estima alrededor del 30 al 50% de todos los residuos urbanos, por eso la importancia de gestionar todo esto de manera adecuada para conseguir un mayor aprovechamiento y un uso sostenible.
El compostaje es un proceso de transformación natural de los residuos orgánicos que se da por un proceso biológico de oxidación. De esta manera, estos residuos terminan siendo abonos ricos en nutrientes.
Así, con la utilización del compuesto resultante, se puede dar una nueva vida y fertilidad a los suelos. Es así que se evita el desaprovechamiento de estos residuos, reutilizando la materia orgánica.
El proceso que ha implementado la compañía para hacer el compostaje tiene puntos importantes a resaltar.
Los camiones especializados transportan a la planta los residuos agropecuarios que vienen de granjas ganaderas y explotaciones agrícolas. Después, en la planta, se estructuran en pilas y se da inicio al proceso.
Cuando ya se ha obtenido el resultado, se carga en los camiones y se transporta a explotaciones agrícolas para que sea utilizado como abono natural.
Para esto, las plantas de compostaje del Grupo Lucas poseen algunos elementos diferenciadores, como las zonas en forma de vaso, los sistemas de desinfección de vehículos a la entrada y a la salida, el embalse para lixiviados impermeabilizado que cuenta con un sistema propio de seguridad y control.
Además de la nave de tratamiento de lixiviados, se cuenta con un sistema de riego autoabastecido, cierre perimetral de toda la planta, maquinaria para cargar, descargar y voltear el compost, y un sistema de cortavientos a través de árboles.
El objetivo es aportar beneficios y ventajas considerables a los campos de cultivo, como la fertilidad del suelo, aumentar la calidad del aire, reducir la cantidad de residuos en los vertederos, que llevan a reducir también las emisiones.
También se reduce la huella de carbono directa o indirecta, se enaltece la sostenibilidad y biodiversidad participando con la naturaleza, y se convierte en un modelo rentable y eficiente.
Es por todo esto que el proyecto de compostaje de Grupo Lucas es uno de los más importantes que ha desarrollado a través de los años, apoyando siempre a la gente, ayudando a mantener la tierra y garantizando una mejora continua del medio ambiente que nos rodea.
Ubicada en la pedanía murciana de El Raal, se dedica al sector de las frutas y hortalizas desde 1970, de la mano de su fundador, Manuel Lucas, padre de los actuales dueños y dirigentes. Su forma de trabajar y su fidelidad hacia sus ideales, les han permitido innovar en varias áreas, lo que la colocan como una de las empresas más reconocidas en el país.
Una de estas innovaciones es que todos los miembros de la familia desarrollan su labor profesional en torno al Grupo, en distintos campos, como la producción, la dirección, en lo referente al campo y a la actividad comercial.
Otra de sus características es la incorporación continua de diferentes variedades de semillas y de productos, lo que los mantiene a la vanguardia. Pero la que puede ser la más importante, poco tiene que ver con todo esto, sino más bien con su gente.
Dentro de su proceso de crecimiento y de mantenerse fieles a sus principios, los trabajadores son siempre invitados a que crezcan junto con las nuevas técnicas y procesos productivos, además de que trabajan en estrecha relación con sus proveedores, siempre con el objetivo de reducir el impacto ambiental.
Es así como se han desarrollado proyectos como la operación polinizador, la implantación de bandejas de plástico rPET o el proyecto semilla. Sin embargo, uno de las mayores apuestas que tiene la empresa es el compostaje.
Son miles de toneladas de residuos diarios los que se desperdician, incluyendo una gran cantidad de ellos de material orgánico. Se estima alrededor del 30 al 50% de todos los residuos urbanos, por eso la importancia de gestionar todo esto de manera adecuada para conseguir un mayor aprovechamiento y un uso sostenible.
El compostaje es un proceso de transformación natural de los residuos orgánicos que se da por un proceso biológico de oxidación. De esta manera, estos residuos terminan siendo abonos ricos en nutrientes.
Así, con la utilización del compuesto resultante, se puede dar una nueva vida y fertilidad a los suelos. Es así que se evita el desaprovechamiento de estos residuos, reutilizando la materia orgánica.
El proceso que ha implementado la compañía para hacer el compostaje tiene puntos importantes a resaltar.
Los camiones especializados transportan a la planta los residuos agropecuarios que vienen de granjas ganaderas y explotaciones agrícolas. Después, en la planta, se estructuran en pilas y se da inicio al proceso.
Cuando ya se ha obtenido el resultado, se carga en los camiones y se transporta a explotaciones agrícolas para que sea utilizado como abono natural.
Para esto, las plantas de compostaje del Grupo Lucas poseen algunos elementos diferenciadores, como las zonas en forma de vaso, los sistemas de desinfección de vehículos a la entrada y a la salida, el embalse para lixiviados impermeabilizado que cuenta con un sistema propio de seguridad y control.
Además de la nave de tratamiento de lixiviados, se cuenta con un sistema de riego autoabastecido, cierre perimetral de toda la planta, maquinaria para cargar, descargar y voltear el compost, y un sistema de cortavientos a través de árboles.
El objetivo es aportar beneficios y ventajas considerables a los campos de cultivo, como la fertilidad del suelo, aumentar la calidad del aire, reducir la cantidad de residuos en los vertederos, que llevan a reducir también las emisiones.
También se reduce la huella de carbono directa o indirecta, se enaltece la sostenibilidad y biodiversidad participando con la naturaleza, y se convierte en un modelo rentable y eficiente.
Es por todo esto que el proyecto de compostaje de Grupo Lucas es uno de los más importantes que ha desarrollado a través de los años, apoyando siempre a la gente, ayudando a mantener la tierra y garantizando una mejora continua del medio ambiente que nos rodea.