La línea circular que realiza el Transporte Urbano de Ponferrada (TUP) se reforzará durante un mes con un autobús híbrido. "Nos lo propusieron y nos pareció buena idea, así que contaremos con un autobús más durante un periodo de prueba", ha señalado la alcaldesa, Gloria F. Merayo. "Si el servicio es satisfactorio buscaremos las formas jurídicas y económicas para establecerlo, pero siempre en vista de las decisiones de los técnicos del Ayuntamiento", ha añadido.
Por otro lado, la alcaldesa avanzó que la próxima semana se reunirá por primera vez la comisión que debe estudiar la forma de gestión del TUP. "Si en seis meses no está decidido habrá serios problemas para pagar las facturas", ha afirmado Merayo.
"Me gustaría haber resulto el problema del contrato del TUP durante estos años de mandato pero no ha sido posible por causas ajenas; yo lo he intentado pero intentarlo a veces no basta", ha señalado.
Merayo ha explicado que el Ayuntamiento cuenta actualmente con "cerca de once millones de euros que van a sobrar". "Si hubiésemos tenido presupuestos nos habríamos evitado este tipo de problemas y tendríamos dinero para reforzar las líneas de autobuses, entre otras cosas, pero no conseguimos apoyo suficiente así que ahora toca ser responsable de lo votado". En este sentido, ha anunciado que no presentará proyecto de presupuestos para este año "para que me lo echen abajo otra vez; una vez vale, pero dos no".
Situación del TUP
La gestión de los TUP se encuentra externalizada en la UTE Begar-Aupsa con prórroga desde que el contrato expirase en 2012, sin que hasta ahora ningún equipo de Gobierno haya dado pasos definitivos en relicitar el servicio, que cuesta cada año a los contribuyentes más de 1 millón de euros anuales en déficit. Este año el consistorio terminó precisamente de pagar los autobuses y marquesinas a la empresa y ya es oficialmente propietario de estos vehículos.
En esta línea, el pleno que el Ayuntamiento celebró el 31 de diciembre acordó dar luz verde al pago del déficit de explotación del TUP de 2017 por valor de 1,3 millones de euros a través de un reconocimiento extrajudicial de crédito y dar así un 'balón de oxígeno' a la empresa concesionaria. Y es que Aupsa-Begar había interpuesto un recurso de reposición contra el acuerdo plenario del pasado 26 de octubre en el que se había reconocido sólo el pago de 298.000 euros en concepto de de amortización de los autobuses y marquesinas, como un "parche" ante la amenaza de huelga por el impago de las nóminas a los trabajadores.
En el mismo pleno también se sacó adelante la composición de la comisión especial que se encargará de estudiar la mejor gestión para el servicio del TUP y que fue aprobada en el pleno anterior y que contará con un representante de cada grupo político, cuyo primer encuentro se celebrará la semana que viene.