El verano suele convertirse en una época negra para los albergues caninos de toda España, donde ven que la situación que viven durante todo el año llega al límite. Acudimos al Albergue Canino de Ponferrada para conocer esta situación 'in situ' y las mejoras futuras del lugar que realizará el Ayuntamiento de Ponferrada este año.
El Albergue Canino de Ponferrada informaba recientemente en una nota de prensa de que estaba al límite de su ocupación con 18 perros al mes apróximadamente, ya que cuentan con 20 caniles. Este hecho sumado a que el verano se convierte en una época complicada del año, no sólo en cuanto a abandonos, sino también debido al notable descenso de adopciones por las vacaciones, hace que aumente la preocupación en la instalaciones en este periodo del año.
Desde InfoBierzo acudimos para conocer de primera mano, cómo se vive esta época del año, las novedades que introducirá el Ayuntamiento en las instalaciones y su gestión y el futuro de este lugar en el que anualmente se adoptan en torno a 135 perros. Un dato que como señalan desde la Concejalía de Salubridad Animal y el propio Albergue "resulta muy positivo".
El concejal de Salubridad Animal, Iván Alonso, insiste en destacar en primer lugar, que no se trata de una perra, sino de un Albergue Canino, "es un lugar previo a la adopción, de paso, con condiciones de salubridad y sanidad", destaca. Desde este recinto "se les cuida y se les prepara para recibir a la nueva familia" explica. Además enfatiza la importancia la labor realizada por Jorge Fernández, el encargado del mantenimiento y las labores del Albergue, "es muy importante el trabajo que realiza, muchas veces haciendo más horas de las que corresponden porque está muy implicado con su labor y con los perros". Es por esta razón, por la que Alonso ya ha anunciado que en la proxima promoción de empleo público sacarán una plaza más para el Albergue, "necesitamos otra persona de apoyo", señala.
No obstante, esta no será la única novedad que planean desde la concejalía, desde la que señalan que "tenemos un albergue de primer nivel". A esta nueva plaza también se unirán adecuaciones a las infraestructuras del recinto, "se va a poner alguna barrera de seguridad" y "vamos a adecuarlo a normativa de colonias felinas, para albergar gatos y poner en funcionamiento este año por primera vez el CER (Captura, Esterilización y Retorno)". Dos grandes novedades que sin duda supondrán un avance en Ponferrada hacia una gestión más ética para controlar las colonias de gatos, evitar su mala alimentación y prevenir residuos, plagas y otras molestias para los vecinos. La idea que plantea Alonso se trata de "intentar tener la opcion de otro albergue para dar gatos en adopcion y tenerlos cuidados" e "intentar bajar el número de colonias en Ponferrada mediante este control".
La idea es que estas novedades se presenten después de septiembre, tras las fiestas patronales de la Encina, "sacaremos la licitación ya que con el periodo electoral hemos aprobado el presupuesto muy tarde y a partir de ahí continuaremos a lo largo de todo el mandato".
Jorge, el ángel de la guarda del Albergue
El ángel de la guarda del albergue tiene nombre y apellidos, se trata de Jorge Fernández, una pieza indispensable para que el lugar funcione, ya que no sólo se ocupa del mantenimiento, sino de la captura de los perros, gestionar las adopciones y recepcionar las llamadas de los avisos para las recogidas.
Fernández explica a InfoBierzo que lo más reconfortante de su labor "es ver la respuesta del perro cuando lo cuidas, ver que se va a Galicia, Asturias o Madrid y va a estar bien. Cuando ves a la gente sabes como va a estar el perro". Sin duda una entrega, que también tiene su parte menos positiva como cualquier trabajo, "a veces ver perros en la condiciones que los ves, también algunos perros que cuesta capturar porque están en sitios alejados, ya que vivimos en una zona en medio de monte, no sabes como hacer para recogerlos, los que son muy asustadizos". Pero no todos los contratiempos tienen que ver con los animales, "a veces tratar con algunas personas, con propietarios" se convierte en una parte complicada de su labor como señala.
La difícil labor de Fernández se ve incrementada con algunas adopciones más costosas, por ejmplo los casos de PPP (Perros Potencialmente Peligrosos), que suelen ser los más complicados de adoptar debido al papeleo que conlleva. "De cachorros es más fácil, pero en cuanto tienen 5 o 6 años la gente es muy reticente", señala.
'Tuli', la perrita que más tiempo lleva en las instalaciones, es uno de esos casos más complicados, "llevó mucho tiempo cogerla", cuenta Fernández. "Se trata de un perro que no le puedes dar a cualquiera, porque si se lo das a alguien inexperto se va escapar, es difícil encontrar una adopcion buena para ella".
Sobre el problema de las devoluciones de los perros, que suele asolar las protectoras de toda España, explica que "por suerte suele haber pocas devoluciones, no es lo habitual". Además, Ponferrada es una ciudad bastante solidaria en cuanto a adopciones se refiere, ya que como afirma el concejal de Salubridad Animal, "el nivel es muy alto" y aprovecha para "dar las gracias a las protectoras, en especial a Peludines con Suerte porque sin ellos no podríamos atender a todas las colonias". El responsable del albergue añade además que "van saliendo, pero ahora en verano estamos más agobiaos y saturados, sin embargo esperamos que de cara a septiembre mejore, ya que la gente ahora está fuera de vacaciones".
El verano, un periodo complicado
En cuanto a los abandonos en verano, una lacra que no es única en nuestro territorio, sino que se convierte en un problema a nivel nacional. El responsable del albergue afirma que "antes se notaba más, ahora realmente es todo el año, es un goteo continuo de perros que aparecen, que se extravían, que se escapan y perros abandonados que aparecen sin microchip". El protocolo a realizar desde el albergue es lo publicarlos a través de la web y "si en 20 días nadie lo reclama lo ponemos en adopción".
El problema en los meses de julio y agosto no está concretamente motivado por los abandonos que se producen, sino que "se nota más en agosto julio que la gente está de vacaciones y hay menos adopciones de manera que el albergue se satura más en estas fechas".
