Estado actual de la parcela / V. AlónEl alcalde de Cubillos reconoce que hace meses que no mantiene contacto "directo ni indirecto con nadie de la empresa". Aunque ICG cumple mensualmente con las cuotas por la compra del suelo en el polígono del Bayo, los plazos de inicio de construcción chocan con la realidad de un solar en idéntico estado después de un año de colocar el cartel.

El esperado asentamiento de la empresa ICG 2000 en Cubillos del Sil, que preveía abrir el Centro Cárnico de Alta Tecnología (Cicat) en 2017 como referente industrial del Noroeste, parece atraviesa por una situación manifiesta: ningún avance en la consolidación del proyecto. Ya se han cumplido seis meses de la fecha marcada por los directivos para iniciar los primeros movimientos de tierra y cimentación en la parcela del Polígono del Bayo que le había sido adjudicada tras llegar a un acuerdo con ADE Parques -la sociedad pública de la Junta encargada de la gestión de suelo industrial y tecnológico de la comunidad- y a la fecha ni el alcalde del municipio, Antonio Cuellas, ni ninguno de los dueños de los más de 5.000 currículos que se habían enviado a la empresa han recibido noticias al respecto.
Fue, precisamente, a principios de mayo cuando los técnicos municipales del Ayuntamiento de Cubillos dieron el visto bueno al anteproyecto del Cicat. En ese momento, el secretario general ejecutivo de ICG 2000, Javier Hernández, confiaba en tener cuanto antes la notificación de esa autorización municipal para iniciar las primeras labores en las semanas siguientes y en julio y agosto comenzar con la construcción del centro, movimiento que ahora, con el invierno a las puertas, no se ha producido ni parece que vaya hacerlo de manera próxima. Por su parte, el actual regidor de Cubillos, Antonio Cuellas, asegura que no tiene ningún tipo de contacto "directo ni indirecto con nadie de la empresa" y, aunque prefiere ser precavido por falta de información, sabe que los tiempos previstos ya se están incumpliendo, pues el plazo de ejecución era de dos años "y ya vamos restando", matiza. No obstante, el hermetismo del asunto y la dificultad que existe para poder hablar con los responsables del proyecto y de la firma cárnica incrementan los malos augurios. Y es que en 2011 la empresa ya hizo un anuncio de desembarco similar que fue seguido, antes de las Municipales de este año, por el mismo anuncio y mimas intenciones. InfoBierzo ha tratado sin éxito de contactar con los responsables de la gerencia de ICG, y con la dirección del proyecto concreto para El Bierzo; es más, algunos de los teléfonos y vías de contacto con los que cuentan los responsables municipales han dejado de tener servicio.
Lo que sí ha podido saber este diario es que la empresa sí mantiene al día el pago de cuotas a la Junta por la adquisición del suelo industrial. La operación se llevó a cabo gracias al 'Derecho de superficie', una medida que minimiza la inversión empresarial inicial respecto al suelo. En lugar de realizar la compra directa de la parcela, ICG 2000 pudo reducir su inversión inicial en hasta un 75% para poder favorecer la instalación del Cicat. La parcela, de 112.000 m2 y valorada en 3 millones de euros, es objeto de un plan de pago a 20 años.
En esta misma línea, Ferrovial, que iba a ser la encargada de construir la planta, tampoco tiene constancia de ningún avance en esta operación para iniciar las obras.
Las fechas se han ido sucediendo pero la realidad es que en la parcela sólo figura el cartel colocado el 29 de noviembre de 2014. Después la idea era comenzar a comienzos de 2015, después para este verano, y ahora se encara 2016 sin ningún atisvo de que los trabajos sean inminentes.
En diciembre del pasado año los ganaderos bercianos ya mostraron su desconfianza en la materialización de este proyecto, y expresaron sus dudas ante una demanda de 300 reses de vacuo diarias y hasta 1.500 de porcino. De hecho dejaron claro que no iban a preparar un incremento escalada de la cabaña hasta que el centro estuviera construido y en servicio. El tiempo parece haber dado la razón a su planteamiento precabido.
Características del proyecto
Cabe recordar que el macroproyecto contaba con unas previsiones de inversión de más de 50 millones de euros (10,8 millones dedicados a la obra obra civil, 14 millones a la instalación técnica y otros 19 millones a maquinaria) y crearía cerca de 250 empleos directos, con una repercusión económica superior a 25 millones de euros anuales. En total, la filial pretendía construir 34.000 metros cuadrados de planta productiva y una inversión de 50 millones de euros que se obtendría del rendimiento de unas 350.000 barquetas de 500 gramos, es decir, unas 175 toneladas de carne diaria envasada, etiquetada y lista para distribuir.
