La Asociación de Hostelería de El Bierzo ha mostrado su “decepción y desacuerdo” con la reciente aprobación del anteproyecto de la nueva Ley Antitabaco, a la que califican de “ley anti-fumadores” y de una norma “sin vocación real de velar por la salud de los ciudadanos”, que en cambio “tendrá efectos devastadores para el sector hostelero”.
En un comunicado, los hosteleros bercianos recuerdan que el tabaco provoca la muerte de unas 60.000 personas al año en España, según el Ministerio de Sanidad, y que el Estado ingresa más de 9.000 millones de euros en impuestos especiales gracias a su venta. “La contradicción es evidente: se permite y se recauda por su consumo, pero se expulsa sistemáticamente a los fumadores de todos los espacios sociales”, denuncian.
La patronal hostelera subraya que durante décadas fumar no solo fue legal, sino promocionado en televisión, eventos deportivos o incluso con máquinas expendedoras al alcance de menores. “Ahora esos mismos fumadores, reconocidos como enfermos por su dependencia, son perseguidos y convertidos en parias sociales por una legislación cada vez más restrictiva”, apuntan.
La nueva normativa extiende la prohibición de fumar a terrazas, campus universitarios, marquesinas y piscinas, incluso en espacios abiertos, algo que consideran desproporcionado y “poco respaldado por la evidencia científica sobre el daño real en estos contextos”.
La Asociación de Hostelería del Bierzo advierte de que los bares y restaurantes se verán obligados a actuar como “policías” de la ley, enfrentándose a clientes y arriesgando sanciones económicas. “Nos colocan en una posición insostenible: vigilar a quienes sostienen nuestro negocio, convertir las terrazas en espacios de conflicto y, en la práctica, trasladar a los fumadores a la acera contigua”, denuncian.
Además, alertan de que la norma creará una “falsa sensación de protección” mientras agrava la tensión entre consumidores y trabajadores.
Para los hosteleros bercianos, el mensaje del Estado es contradictorio: “Paga impuestos por tu adicción, pero no fumes donde te vean”. En su opinión, la nueva ley estigmatiza al fumador, protege la recaudación, ignora la responsabilidad histórica del Estado en la promoción del tabaco y convierte a los hosteleros en “verdugos a la fuerza”.
“Si realmente se busca proteger la salud pública —añaden—, la vía debería ser reducir progresivamente la producción y venta del tabaco, invertir en programas de deshabituación e impulsar alternativas de reducción de daño. No criminalizar al consumidor ni poner al sector hostelero contra las cuerdas”.
Entérate de las últimas noticias y avisos importantes haciéndote seguidor de nuestro canal en WhatsApp. Entra en este enlace y activa las notificaciones del Canal
¿Has sido testigo de algún suceso o accidente? Tu foto o video tienen valor para nosotros (€). Accede al Cuestionario de envío (sólo para cuando ocurre) y Condiciones
