Este lunes se produjo la segunda víctima mortal por el brote de gastroenteritis en la residencia de Flores del Sil, la mujer de 88 años que ingresó en el Hospital del Bierzo en estado irreversible. Dos días después, la familia de la fallecida ha emitido un comunicado en el que pone de manifiesto "la falta de información sobre lo que estaba aconteciendo en la Residencia entre el 1 y el 6 de septiembre, cuando fue ingresada con deshidratación e insuficiencia renal, con un deterioro físico irreversible, así como la mala Praxis y falta de personal especializado para el control de esta infección".
Los seres queridos de la fallecida lamentan que la ausencia de personal preparado para este problema médico, que en un principio afectó a medio centenar de los residentes en el centro, junto con el "retraso en el traslado al Hospital del Bierzo" pudieran ser hechos determinantes en el fatal desenlace. Precisamente es ese retraso el que provoca que "la persona ingrese en un estado de gran deterioro físico, falleciendo seis días después".